Los militares espiaron a los que cuestionaron la farsa/tiranía covid: el caso británico. Por Luys Coleto

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Los interesados por la numerología sabemos lo fascinante del 77, doble siete, duplicidad de la «perfección». Grosso modo, diríase que el 77 deviene una expresión de la libertad personal (ains, la 77 ª División del «Ejército Popular de la República»). Pues eso. Entonces, ¿cómo ha de llamarse una militaresca y liberticida brigada de «sombreros» negros dedicada a quitarnos los últimos ápices de la cada vez más moribunda y sacrosanta libertad? Acertaron. Brigada 77. Británica mierda, creada en enero de 2015 se forjó bajo el concepto Ejército 2020 (vaya fecha, curioso: rejuas).

Espiando a los que osaron exponer ciertas dudas en la payasada covidicia

Periodistas o políticos de cierto renombre que expresaron ciertas dosis de escepticismo (´disinformation‘ and ‘harmful narratives`, en orwelliana neolengua, el mundo al revés), incluso con la puntita, ante la plandemia/farsemia/falsemia, sistemáticamente espiados, objetivos de esta inicua unidad militar británica.

Los periodistas Peter Hitchens y Toby Young, dos ejemplos a vuela teclado. Y aparte de tal basura militaruna, células gubernamentales, cual totalitarios huelebragas, más espionaje. Entre ellas la Unidad de Lucha contra la Desinformación, con sede en el Departamento de Digital, Medios de Comunicación y Deporte. También participó en esta siniestra caza de brujas de la tiranía covid la Unidad de Respuesta Rápida de la Oficina del Gabinete británico.

A todo el que les pete

Y espiados ciudadanos del común que se vieron atrapados en la turbia red de esta operación de espionaje y vigilancia. Sus cuentas de redes sociales, controladas, examinadas, chapadas. Este escrutinio incluyó el rastreo de palabras clave como «contención » o «confinamiento o “vacunas” o “exceso de mortalidad”…y la personalísima identificación de quienes osaban teclear tales vocablos “malditos”…

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Autor

Luys Coleto: Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.