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Organizada por la Cámara de Comercio española, la participación de los ministerios de Comercio, Información y Turismo, Asuntos Exteriores y la brillante colaboración del Ayuntamiento de Madrid, se celebró en la ciudad de los rascacielos entre el 17 y el 23 de marzo de 1969 una grandísima exposición que brilló por su calidad y su variedad, según se publicó en la prensa de Estados Unidos. Porque lo que en un primer momento iba a ser una cena-baile titulada “Una noche en Madrid” terminó convirtiéndose en el evento más importante que Madrid haya celebrado nunca en el exterior. El “ABC” del 15 de marzo de ese año publicaba una amplísima información del evento, incluyendo incluso el menú de la comida con las autoridades madrileñas y españolas y neoyorkinas sentadas a la misma mesa… y la revista “Villa de Madrid”, que dirigía en ese momento el gran periodista don Rufo Gamazo Rico, publicó un histórico trabajo que hicieron sobre la “100 cosas que es Madrid” (guía para los norteamericanos) reunidos en una comida los escritores Tomás Borrás, don Federico Carlos Sainz de Robles y otros.

Por su interés reproduzco las “100 cosas que es Madrid” de don Tomás Borrás:

Abra usted un planisferio: Madrid es el punto central del mundo. Toda la vida se desarrolla alrededor de él, en círculos concéntricos.

También es el punto de intersección entre Europa y África, el hito medio.


3. Asimismo la encrucijada del aire, el sitio donde se cortan las líneas aéreas, donde las azafatas de todos los idiomas cuentan: «¡Ya no falta más que la mitad!»


4. Y el metacentro de la Península Ibérica, que es la plataforma de lanzamiento sobre hemisferios y meridianos.


5. En fin, el curioso caso geográfico-geométrico que mira para todos lados. Madrid es el superjano.


6. Dice el señor Greenwich que ocupa este sitio, precisamente: 14° 45′ de longitud Oeste y 40° 24′ 30″ Norte. A él dejamos la responsabilidad de una cosa tan seria. Lo más seguro es que está en el Cerro de los Ángeles, donde se posan los ángeles.


7. Es una villa. Nada de ciudad, cosmópolis, megalópolis, urbe ni enfáticas pamplinas. Villa, que es lo que da añejo de solera.


8. Tiene radios a todas las comunicaciones con lo extra, terrestre y astral. Como la Rosa de los Vientos.


9. Villa, sí. Mas rodeada de reales sitios con los últimos palacios que quedan de las monarquías suntuosas. Depósitos de arte, tradición, historia, nobleza de arriba, de abajo y de en medio. Obras incomparadas, tesoros, acumulación de tesoros sin posibles parangones, puesto que lo viejo no puede hacerse «ya» viejo también.


10. Estación de llegada turística, por ello. Anualmente, 19.000.000 de viajeros curiosos que salen repletos de estética y pasados por la rueda de afilar de la sensibilidad; bajo los brazos, cultura en láminas y explicaciones para soñar diez vidas. Turismo, turismo; idiomas en las aceras apresuradas yendo y mirando.


Es capital de España. Sin comentario.

12.Es el hormiguero de tres millones cien mil personas, más doscientas mil diarias añadidas (forasteros).

13. Es el jugueteo de ochocientos mil ratones metálicos. Cien mil, de entra y sal; los otros, matriculados, que ratonean esquivándose hábiles y retozones por las calles del centro (laberinto) y las del anillo anchuroso del Madrid modernísimo (largas caravanas).

Avenida José Antonio en 1969


Es la topera de cincuenta kilómetros de Metro, y pronto lo será de los otros cincuenta que va zapando la tozudez para poder llegar cronometrados a todas las afueras.

15. Es la sede del Jefe del Estado, Gobierno, Administración superior, diplomacia, aspirancia, peticionancia y lograncia.

16. La cabeza. Originadora, invencionera, acumuladora, expandidora, observadora, calculadora, tuteladora, amadora y unidora del conjunto.

17. Por lo que está Madrid erguido a setecientos metros sobre el nivel de los mares que rodean su plataforma, orlada entre Madrid y los mares de ubérrimas montañas.

18. Una de ellas, el murallón del Guadarrama, es su recuerdo de los tiempos en que Madrid era la capital del Cuaternario. De esto hace más de quinientos mil años. Tal es la data de su linaje.

19. De todo el cuerpo del país, es asimismo el corazón que bombea la sangre de vitalidad, cuanta recibe y envía. No hay glóbulo rojo que entre en él que no se reexpida oxigenado: idea, acción, ensueño, logro, revulsivo, gozo, dolor.

20. Escuela de doscientos cincuenta mil escolares. De párvulos a doctores. En todos sus grados: iniciaciones, técnicas, maestrías y aprendizajes.

21. De ellos, veinticinco mil hispanoamericanos que madrileñizan su ánima y respiran su aire sutil, que no mata un hombre valioso, pero apaga un candil de ignorancia y penumbra.
Es un solar de seiscientos cinco millones de metros cuadrados. En 1939, sólo sesenta y seis. Decuplicado en treinta años. Crecimiento sólo superado en el mundo por Tokio. Los pueblos de alrededor de entonces: los dos Carabancheles, Chamartín de la Rosa,  fueron asimilados en 1948; Aravaca, Barajas, Canillas, Canillejas, Hortaleza, en 1949; Fuencarral, El Pardo, Vallecas y Vicálvaro, en 1950. Hoy, con los proyectos del Área Metropolitana (organismo de la extensión), echa el ojo a Majadahonda, Las Rozas, Villanueva de la Cañada, Villanueva del Pardillo, Valdemorillo, Navalagamella, Zarzalejo, Las Matas, Colmenarejo, El Escorial, Galapagar, Torrelodones, Hoyo de Manzanares, Villalva, Peguerinos, Cercedilla, Los Molinos, Navacerrada, Becerril, Collado-Mediano, Alepedrete, Negrales, Cerceda, Getafe, Villaverde, Torrejón de Ardoz, Chinchón… En los diarios se anuncian pisos (pisos de bloques) en Móstoles, Alcalá de Henares y aun en La Cabrera.
El Área Metropolitana del Ayuntamiento traza sus proyectos sobre Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Paracuellos del Jarama, San Fernando de Henares, Coslada, Ribas del Jarama, Leganés, Brunete, Mejorada del Campo, Velilla de San Antonio, Pinto, Colmenar Viejo, Villanueva del Pardillo, Majadahonda, Villanueva de la Cañada, Pozuelo, Boadilla, Villaviciosa de Odón, Alcorcón, Getafe y Torrejón. Además de los antes cifrados, que son barrios del cogollo de Madrid en realidad, y éstos, lo que llaman «las afueras», o sea, dentro de Madrid y fuera del casco viejo. Madrid será pronto otra decuplicación. Esta es la noticia de última hora. 


Estos tres anuncios publicitarios son una pequeña muestra de la creación de nuevos barrios; «los barrios del cogollo» que cita Tomás Borrás.

23. Es el nudo de los ocho ferrocarriles de primerísima importancia y de las seis autopistas-carreteras de llegada a todos los litorales y fronteras. Nudo que no anuda, sino que hace continuar las rutas. Madrid no se queda ni hace quedar. Es el supersemáforo, el acicate.

24. Es el aeropuerto transoceánico universal. (Ya dijimos su categoría de punto centro del planisferio.)
Además tutela otro gran aeródromo para el mundo entero, el de Torrejón de Ardoz. Y sostiene otros: Cuatro Vientos, Getafe y Griñón.

25. Es la posada de treinta mil inmigrantes anuales que a Madrid llegan, hallan habitación, trabajo y compañía fraterna.

26. La ciudad con sólo un 25 por 100 de madrileños. Todos madrileños en cuanto pisan por primera vez sus calles, todos de «aquí». Pues para Madrid no hay «allí» ni «otra parte». Es la plaza popular de las Españas.

27. Es la cuna de veinte mil nuevos madrileñitos de taller casero, anualmente. Los que piden disculpas a los demás: «¡ Dispense que sea de los madriles!»

Pila bautismal de una de las mejores literaturas de la cultura absoluta: Cervantes, Lope de Vega, Quevedo, Tirso de Molina, Calderón de la Barca, Ercilla, Benavente, para citar sólo nombres de inscripción en mármol.
Paradoja suya es ondular en un llano con pequeños pechos de colinas, alisado por el urbanismo, y a menos de treinta kilómetros poder subir a 2.430 metros ( Peñalara) o a 2.138 (Siete Picos). Es su mayor riqueza el Guadarrama. O, más arriba aún , Gredos, baluarte de la vieja Castilla.

30. Como no tenía mar, Madrid se lo ha hecho, y es marítimo. Los embalses de San Juan y el maravilloso de Entrepeñas y Buendía son sus mares interiores.
Es éste un Madrid de lanchas y balandros, con los que juega al mar en su mar gracioso rodeado de casitas de campo con pájaros, muchos, y pocos peces.




Es el salón donde se puede contemplar lo viejo y lo nuevo: lo mismo la torre de San Pedro que la avenida del Generalísimo. O sea, el románico y el corbousier.
Igual las tablas de los primitivos que los abstractos. Las sillas de mano o el último reactor. Si se quiere, el libro de horas de Isabel I y el texto camelístico de Mao Tse Tung.

32. Es cincuenta museos, cada uno de su especialidad. El Prado o el Lázaro Galdeano, el Arqueológico o el Decorativo. Los platos árabes de Osuna y las botellas de Chicote. Todas las gamas, todos los capítulos, todos los gustos y deseos cumplidos. (También el Museo del Mar, ¿no se lo decíamos?)

 

Madrid tiene una temperatura media de catorce grados centígrados. Oscila desde cuatro hasta veintinueve (invierno o verano). La Sierra manda, además de la estación. La Sierra es su manantial de equilibrio y medicina. Por eso es Madrid una de las ciudades más sanas.

34. Es la del otoño hermoso, con cielos de celajes admirables hasta el éxtasis; inviernos tolerables y alegres, corta primavera, precoz verano y un estío de noches frescas. Madrid es de piel morena, tostada por montañera. Sólo sesenta días al año está entoldado de nubes. ¡ Diez meses de sol, villa solar, campesina perpetua!

35. Es la sede de los teléfonos directos a la Luna, a lo estratosfero, pronto a Marte, desde Robledo de Chávela, Cebreros, Fresnedilla y Buitrago. Y se cambia imágenes por los satélites de continente a continente. Ciudad astrofísica.

36. Es doscientos cincuenta mil abonados al teléfono. (Las señoritas se cuentan como abonado doble.)

Además, los teletipos y los enlaces, hasta el cable submarino y la T. S. H. Un Madrid invisible de ondas interiores y electrónica.

38. Registra tres millones de viajeros diarios en Metro, autobús, taxi, microtaxi y autocares a los distritos-pueblos-ensanches.

 

 

PLANO DEL METRO DE MADRID DE 1969
Plano Histórico de la red de Metro de Madrid (1919–2009)
© Consorcio Regional de Transportes de Madrid


El de los «aparcamientos» subterráneos. Unas veinte mil plazas. Y se excavan otras con precipitación de urgencia. Madridsub o Submadrid, escamoteada de la superficie tanta circulación abajo, en la termitera, como en el sobresuelo, bajo cielo. 

 

 

Es el generoso que a cada cuestación callejera—y hay varias al año—se saca del bolsillo sesenta u ochenta millones y los abandona una y otra vez en la bandeja de la peticionaria.

Aprovechamos esta cosa que dice Borrás que es Madrid-ciudad solidaria y muy acostumbrada a las cuestaciones-para sumar samaritana obra a la de los espectáculos que nos ocupan.

 

Se bebe, ya a estas horas, los ríos Lozoya, Sorbe, Guadarrama, Jarama, y empieza a hacerle sangrías al Tajo, el que enfría la primera central de electricidad atómica. El sistema de embalses serranos y del Sur para dotar de agua a Madrid cuenta ya los diez, con más de dos mil millones de metros cúbicos líquidos almacenados.

Cuando don Tomás habla de»la primera central de electricidad atómica», se está refiriendo a la central nuclear José Cabrera, también conocida como «Zorita». Fue construida por Unión Eléctrica Madrileña y puesta en funcionamiento el 17 de julio de 1968. Dejó de funcionar el 20 de abril de 2006.

 

De Foro Nuclear. Fuente: Enresa


La noche de Madrid es una galáctica. Pues Madrid usa dos sistemas solares: el del astro y el del mercurio, el neón y el átomo transformado en destellos. Por la noche no es villa, su campo desaparece; es ciudad artificial con estrellas oscilantes y danzantes, que se presentan como vicetiples de la luz y anuncian algo prestidigitado.

43. Es cincuenta exposiciones de pintura, escultura, grabado e intento original todos los días del año, renovándose como hojas del calendario de la fama.



Es la charlatona: conferencias, conferencias, conferencias. Dice el proverbio: «A las siete, o la das o te la dan». Las ciencias y la sabiduría, y aun la burla. Lenguaraz y comunicativa, salones que opinan que sí, aplauden y «¿Qué ha dicho?», «¡Ha estado admirable!», rebose de cultura de cada cual, samaritano del cántaro vacío de los otros.

45. Es el autor de doscientos estrenos teatrales todos los años. Madrid, meridiano del teatro del habla.

46. El que alberga veintidós teatros, un circo fijo y varios de carpa.

47. El que ve correr toros en tres plazas, incluido San Sebastián de los Reyes, al mismo tiempo.

48. El de cuatro estadios para el balompié. Entre ellos, el del Real Madrid.

49. El de la Ciudad Deportiva del Real Madrid, más otros conjuntos universitarios, juveniles o de asociados. Todo el de menos de treinta años en cultivo de algún juego de gallardear y virilizarse. Incluido el esquí y el noble, solitario, desinteresado y sin público montañismo.

Las cosas 48 y 49 quedan resumidas en la imagen del presidente madridista don Santiago Bernabéu en tiempos de la Copa de Europa. Fotografía tomada en el aeropuerto de Barajas en noviembre de 1969 cuando el mítico personaje, que «encendía puros con billetes de millón», se disponía a viajar a Bruselas para asistir al encuentro entre elReal Madrid con el Standard de Lieja. A don Santiago le preocupaba mucho el tema de los árbitros: «Querría que cuando haya un penalty, se toque, lo mismo si lo ha cometido el Madrid como el equipo contrario. Estamos haciendo lo posible para que este maravilloso espectáculo se mantenga.»

 

Reportaje gráfico, Vega. Hoja del Lunes, 17 de noviembre de 1969

 

Es Madrid el fomentador de suplementos de ensueño en ciento cuarenta y tres cines. Entre ellos se alistan los más lujosos de Europa.

 

Pues ya lo ve, mi querida doña Isabel, mi admirada doña Isabel, que no siempre tiempos pasados fueron peores, que ya en 1969, cuando usted no había nacido, Madrid ya le abría las puertas de lo que usted quiere hacer ahora: un Madrid que viva en libertad, sin comunismo y sin locos en la Moncloa. Yo que usted me estudiaría bien lo que fue aquella semana de Madrid en Nueva York y trataría de hacerla igual o superarla. De lo que estoy seguro, porque usted es capaz de levantar y hacer ganar… ¡¡¡hasta al PP y al señor Feijóo!!!.

El resto lo pueden ustedes ver en el link que le acompañamos: Historia Urbana de Madrid: Las cien cosas que es Madrid (I) (historia-urbana-madrid.blogspot.com)

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LEER MÁS:  En recuerdo la muerte del Sargento C.L. Carazo Orellana el 19 de diciembre de 1974 a manos del Polisario
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