Batet, Pedro Sánchez, Guantánamo, Siberia. Por Ignacio Fernández Candela

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Con la tramposa, manipulada y miserable victoria amañada por la prevaricadora Batet, la napia de la comunista Yolanda Díaz se agitó convulsivamente peligrando la integridad física de la Calviño, cuyas bragas casi se le deslizaron hasta los tobillos de los íntimos sudores que la acometían cuando creían perdida, por un momento de confusión, la votación sobre el maquillaje de la Reforma laboral. Sospechoso fue el cum fraude cuando hizo un gesto de no dar por perdido nada a la espera de que los servicios telemáticos y, muy seguramente adulterados, del Congreso junto a la proverbial prostitución, metafórica, de la Presidencia del Congreso hicieran efectivo ese trabajo encubierto de corrupción que con la más miserable caradura pudo verse en público: la victoria sucia por nuevo pucherazo del reconocido sinvergüenza a escala mundial que, por arte del amaño de votaciones que domina a gran y pequeña escala, ocupa primigenia e ilegítimamente La Moncloa. Como la bazofia antidemocrática de colar la imposición de las mascarillas en la calle junto a la votación de la «paguita» a los jubilados. El esperpéntico monclovita en otro país estaba detenido a punta de bayoneta calada por tramposo, con un habitual cariz delictivo que se le conoce incluso allende nuestras fronteras.

La de anteayer es una muestra más del juego sucio del hijo de sus favorecidos padres para vergüenza exponencial de los votantes socialistas y podemitas y medios de comunicación comprados como meras fulanas, que a estas alturas pueden identificarse por el hedor colectivo que expelen para tragarse todas las trapisondas y estafas del antaño trepa de saunas en complicidad con la barredura bolivariana. Un vertedero siniestro todo este baluarte infernal de la guarrada política y personal que representan fulleros de actitudes impunes como repulsivas.

Si a la peste nacional representativa de este presidente tabernario y corrompido, como los progenitores del Playbol, que conforman esta molicie de estafadores, se añade el ridículo internacional reconocido por donde anda este fraude con patas, en el suma y sigue sin límites está implícito que traspasadas todas las líneas rojas acabe el tonto del Falcon pagando los errores de ególatra que le han llevado a traicionar a Rusia, EEUU y la OTAN. La rabieta que le ha impulsado a filtrar documentos ultrasecretos en medio de la escalada de tensión por el conflicto de Ucrania, le convierten en un verso suelto como objetivo a neutralizar.

El cabreo de Putin, Biden y mandamases de la OTAN debe de ser tan mayúsculo como para tratar un problema con nombre propio. Tanto va el cántaro a la fuente como el Falcon usa con arriesgada frecuencia, que al final Sánchez podría pagar sus descabelladas imbecilidades. En la política nacional hacen lo que les viene en gana con una Justicia gregaria o aletargada, pero cuidado con tocar los cojones de verdaderos estadistas porque como se acabe la paciencia de los líderes mundiales, el tahúr Pedro Sánchez puede tener los días contados… Y ni las maniobras de Batet ni los jueces comprados, ni la Fiscalía, ni el Demonio que le ha dejado hacer hasta ahora le salvarían, es un decir, de una visita a Guantánamo, a Siberia o al mismísimo Infierno al que irá de cabeza cuando se le acabe el tiempo. Está que se lo rifan.

Autor

Ignacio Fernández Candela

Editor de ÑTV ESPAÑA. Ensayista, novelista y poeta con quince libros publicados y cuatro más en ciernes. Crítico literario y pintor artístico de carácter profesional entre otras actividades. Ecléctico pero centrado. Prolífico columnista con miles de aportaciones en el campo sociopolítico que desarrolló en El Imparcial, Tribuna de España, Rambla Libre, DiarioAlicante, Levante, Informaciones, etc.
Dotado de una gran intuición analítica, es un damnificado directo de la tragedia del coronavirus al perder a su padre por eutanasia protocolaria sin poder velarlo y enterrado en soledad durante un confinamiento ilegal. En menos de un mes fue su mujer quien pasó por el mismo trance. Lleva pues consigo una inspiración crítica que abrasa las entrañas.
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