19/09/2024 23:25
Getting your Trinity Audio player ready...

Aunque no exista una expresa declaración de guerra, convendremos en reconocer que los efectos de una conflagración bélica alcanzan tanto a las naciones directamente involucradas como a aquellas que empujadas por intereses particulares, espurios, o simplemente políticos, o en su caso, a las que se sienten obligadas a cumplir con los tratados u obligaciones internacionales, se convierten tácitamente en “contendientes” de segundo orden.

La invasión rusa de Ucrania, trasformada de facto en guerra abierta, ha proporcionado la coartada perfecta al gobierno socio-comunista para continuar mintiendo sobre la actual situación de caos social, tergiversando a su vez las razones y verdaderos motivos del desastre económico y moral que sufre la sociedad española.

De modo unilateral, conforme a las enseñanzas de sus totalitarios dogmas, en el contexto y con la excusa de la guerra de Ucrania, el gobierno, esta especie de tisis de la civilización que detiene la vida, celebra la victoria en esta última batalla de la guerra total que ha declarado a España.

A estas larvas voraces que no reparan en el rápido despojo de los muertos después de la victoria, que viven a costa del enemigo derrotado, esta lepra sanchista-comunista que corroe y carcome  sin gloria y con deshonor al adversario, que deja el campo de batalla al alba del siguiente día sembrado de cadáveres desnudos, hay que hacerle la guerra sin cuartel ni tregua para culminar con la aniquilación de esta hez de la humanidad, de estos fantasmas incorregibles de criminal ideología, de no hacerlo así, nos veremos abocados a una eterna lucha en detrimento de un efectivo orden social y de un verdadero progreso vital.

Lector no se deje engañar por este horrendo personaje cuyo alumbramiento se produce el día del   aborto político que lo puso en la presidencia del gobierno durante el siniestro proceso del cambio de piel de la serpiente “alpargatera”; si Vd, con un leve esfuerzo intelectual es capaz de romper las paredes donde se instala su cerebro tapiado, y decide ver la luz, se lo agradecerán sus descendientes y por supuesto los españoles que apostamos por una España de progreso, unida e integra.

Perspicaces, prudentes, sabios y dialogantes lectores, por caridad, respondan, ¿Estamos en guerra?

Antes, solicito la venia para indicarles que las guerras no siempre son cruentas; existen otras más sutiles y perturbadoras que atentan contra el propio individuo, contra la propia existencia, contra la Naturaleza, en definitiva, contra el alma, el espíritu o el propio ser racional y libre.

LEER MÁS:  El fin del Estado de Derecho. Por José Manuel Bou

El gobierno presidido y pastoreado por el hortera dependiente de un comercio de sedas, debe de creer que la salvación de la sociedad estriba en la multiplicación de los parásitos que le rodean, de las sanguijuelas ignorantes y estúpidas que le asesoran y que no cesan de hocicar en los pesebres del procomún para satisfacer su desenfrenada gula.

El apócrifo e ilegítimo presidente no solo es el supremo representante de la “cloaca máxima” nacional, ¡no!, es el abanderado “español” de la Agenda 2030; estercolero creado por las élites mundialistas que tienen como objetivo la instauración de un “Nuevo Orden” mundial, algo parecido a los nuevos órdenes nazis o comunistas.

“La Agenda 2030 es nuestro Plan”

En aras de la brevedad, la destrucción de la familia; la invasión irregular migratoria; el culto a las nuevas doctrinas del cambio climático que se traducen en una nueva religión, en un nuevo “dios progresista” al que hay que venerar y rendir pleitesía; el adoctrinamiento en cualquiera que sea el ámbito social, y lo que es más preocupante el déficit educativo que esto genera en las escuelas que son los pilares que soportan el desarrollo “sostenible”, natural y racional de una sociedad; la pestilente ideología de género que pretende destruir el orden y la ley natural por la que el hombre se ha regido durante milenios, Torre de Babel, edificada a expensas de bastardos intereses personales, en la que se duda, y es un ejemplo, si uno es hombre o hembra de orangután; la perdida de la dignidad del hombre que es acusado de todos los males y desastres de la Creación; la reducción de la natalidad por la vía del aborto, la eutanasia o eugenesia; la sinrazón de equiparar al hombre con cualquier irracional; estas aberrantes consecuencias, sin olvidar  que este plan globalista usurpa la soberanía de las naciones, son las que, si no lo evitamos constituirán el kit de regalo envuelto en papel de celofán que la satánica Agenda 2030 ofrecerá a la humanidad.

¿Estamos en guerra?

LEER MÁS:  París, el Real Madrid y los bárbaros. Por Jesús Aguilar Marina

No conforme el presidente con todo el Himalaya de mentiras y desmanes cometidos contra España y los españoles, extremos que le permiten hasta el momento conservar su sillón monclovita, y siendo consciente de que le queda poco para que las urnas le propinen una patada en el tafanario, se descuelga con una frase,— digna de un estadista y ejemplar político, obligado por su traidora determinación de afrontar lo que le resta por destruir del espíritu de concordia de la Transición,—“a por todas

  También, Satanás siempre ha ido a por todas, ya sabemos que Satanás tiene dos nombres: se llama Satanás y se llama Mentira.

Se resistirá con malas artes a la prevista derrota e irá a por todas las Instituciones, someterá a sus objetivos políticos todo lo que se oponga al fin último de descomponer y enfrentar a la sociedad completando su esquema totalitario y conceptual del Estado, invadirá impúdicamente la TV, extorsionará a los medios audiovisuales de comunicación, asediará las plazas que se le ocurran, organismos, entidades, sociedades…

Podrá radicalizarse hasta el punto de competir con su malhadado y difunto compañero Largo Caballero o elevar a los altares a los asesinos etarras, se tomará muy en serio hasta donde pueden llegar las secciones de agitación y propaganda socialistas, seguirá torpedeando la línea de flotación de la empresa y castigando sus beneficios, los impuestos llegarán a ser confiscatorios, las feministas radicales, aleccionadas y dirigidas por su ministra de igualdad, invadirán las calles en sus briosas monturas, armadas con arcos y flechas…..

Qué no tendrá que ocurrir para que una gran parte de la sociedad, aquella que describe Galdós en una frase genial: “Mi Olla, mi Misa, mi Dña Luisa”, salga de la abulia e indolencia,  motor de sus oscuras, tristes  e inútiles vidas que en  poco o en nada contribuyen al bien social o en la lucha contra el maligno político de turno.

¿Estamos en guerra? 

Autor

Avatar
REDACCIÓN