Habrá que buscar presupuesto para los sacaleches gratuitos. Por Julio Merino

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Yo no sé muy bien cómo funciona esto de Google, Instagram, Facebook, Twitter o lo que es HBO, Netflix…. Pero hay cosas que me sorprenden. Por ejemplo, que hoy buscando en Google las posibles cifras de Paro de los primeros 15 días de agosto no encontré nada y las del mes de julio, escondidas tras la “resurrección” del Barça, tres líneas… sin embargo, y sin buscarlo, me he encontrado que Google le dedica ¡¡10!! informaciones a los sacaleches de la señora Ministra Irene Montero. Se nota que es más importante saber “sacar” a las mujeres, la buena o mala leche que tengan en su cuerpo, que el Paro que nos lleva al desastre.

Aunque, al parecer, como la idea de la señora Ministra y sus sapientísimas Directoras Generales que la acompañan, ya están preparando la creación de un Banco de Leche de Mujer (BLM), si es verde tendrá premio, que sirva de amparo para las madres que por h o por b no puedan amamantar a los hijos… y eso seguro que da infinitísimos puestos de trabajo.

¡En algo hay que gastar los 20.000 millones que le ha regalado su “amigo” y Presidente, don Pedro Sánchez!

Y como no quiero que digan que me lo invento les reproduzco y les señalo las 10 informaciones de Google, para que, si los lectores están interesados, busquen y lean, son estas:

Y he dejado para el final lo que la propia Ministra y madre ha dejado por escrito sobre el uso que ella le dio al sacaleches para sacar adelante a sus mellizos:

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha compartido en Instagram este sábado su experiencia con la lactancia de sus hijos Leo y Manuel para visibilizar la realidad de miles de mujeres. “Si algo tienen en común todas las experiencias de lactancia que he vivido y compartido con mis amigas estos años es que casi ninguna ha sido como nosotras esperábamos. Hemos tenido que aprender juntas y sobre la marcha”, ha señalado.

“Mi primera lactancia, la de Leo y Manuel, fue básicamente esto: un sacaleches doble cada tres horas durante más de tres meses. Esa leche era el alimento de Leo y Manuel y lo que sobraba, como hacían otras madres de bebés prematuros, lo donábamos al banco de leche del Gregorio Marañón para otras criaturas. Cuánto le debemos a la sanidad pública, a todas sus profesionales, a Manuel Sanchez Luna”, ha continuado en el texto que ha compartido junto a una foto de ella misma usando un sacaleches.

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Montero ha contado que fue una amiga suya quien consiguió que saliese la leche de su pecho. “Con ella compartí después muchas otras dificultades y alegrías de nuestras lactancias y nuestras maternidades. Tres meses después, a las semanas de llegar a casa, pasamos a la leche de fórmula. Por el camino aprendí, vi cientos de vídeos de @albapadibclc [una experta en lactancia] compartí experiencias con muchas amigas, hablaba de la lactancia de forma recurrente, leí y viví emociones muy intensas. Con Aitana las cosas fueron muy diferentes y hemos tenido dos años y medio de teta, de la que se despidió ella misma cuando las dos lo decidimos”.

La ministra también ha asegurado trabajar “para que todas las mujeres puedan elegir su camino también en la lactancia sin culpa ni vergüenza, sin el cuestionamiento de una sociedad que todavía considera que las decisiones sobre nuestros propios cuerpos no son solo nuestras”. “Las decisiones que tomamos sobre la lactancia no nos hacen mejores o peores madres; sobre todo, deberían ser siempre respetadas y deberían contar con el apoyo de una red que sostenga, acompañe y cuide”, ha añadido.

Por eso llama a “hacer más fuerte lo común”. Con “mejores permisos de maternidad y de cuidados, la conciliación y la corresponsabilidad, las escuelas infantiles, la sanidad y la educación, la red que hace posibles maternidades diferentes pero sin soledad, decidamos lo que decidamos”. “Nuestra forma de organizar la economía y la vida no puede seguir dando la espalda a la crianza, a los cuidados, al valor del tiempo para vivir, especialmente para las mujeres”, ha concluido.

Autor

Julio Merino: Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.

Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.

Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.

En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.

En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.

Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.

Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.