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Como vengo diciendo desde hace algún tiempo, o sea, desde que llegaron los virus (el de la pandemia y el comunista) y me encerraron, nos encerraron, en la jaula que vivo y sueño o sueño y vivo ya no sé lo que es realidad y lo que es ficción, ni si lo que pienso lo he soñado o lo que he leído es un sueño…
Pero, el caso es que si no fuera por «mi antídoto» natural ( leer el Discurso del Rey del 3 de octubre de 2017, dos o tres veces al día) contra el «stress» ya me habría vuelto loco. Hoy, y lo aseguro, ya no sé si los dos sueños que he tenido mientras dormía un rato la siesta, han sido sólo sueños o se han producido de verdad.
Por ejemplo, he soñado que el Rey Don Felipe aparecía en TVE vestido con su uniforme de capitán general y en un tono conciliador decía:
«Señores, como veo que el ambiente político-militar-civil anda algo movido por los pactos del Gobierno con los independentistas y por los escritos de algunos militares yo sólo quiero decir que el Rey está y estará siempre donde le ha fijado la Constitución y que de acuerdo con ella defenderá con todo su empeño la Unidad de España.
¡ España, siempre España!»
Y el otro sueño, o disparate, o deseo, o locura… es para irme directo al psiquiatra (si creyera en la psiquiatría). Pues, hoy he soñado, tal vez porque anoche me acosté leyendo el Discurso de Investidura que pronunció aquel día que le eligieron Presidente del Gobierno (2-12-1982), que Felipe González había convocado una Rueda de Prensa, como antiguo Secretario General del PSOE (así figuraba en la nota de la convocatoria), en el «Palace» y con Alfonso Guerra a su lado y otros socialistas importantes de la última Ejecutiva que presidió, para decir:
«Señores, les he convocado aquí, precisamente aquí, porque aquí comenzó todo, para hacer pública mi decisión de volver a la política y como para mi, naturalmente, la política es el PSOE al PSOE quiero volver… pero, no al PSOE del Sr. Sánchez, porque eso es otra cosa. Mi PSOE, el PSOE de su fundador, aquel «Abuelo» que se negó a entrar en el Congreso de los Diputados si no lo podía hacer con la cara alta y por la puerta grande, aquel PSOE que en 1982 alcanzó el Poder amparado por 202 diputados y sin necesidad de pactar con los enemigos de España… Sé que estoy viejo y sé que no estoy ya para una labor de Gobierno, pero sí que estoy, y estaré mientras viva, para salvar al PSOE y reconducirlo al camino socialista que el Sr. Sánchez ha abandonado.
Así que .mañana mismo inicio mi campaña de Primarias por toda España y visitaré todas nuestras agrupaciones sin desmayo….naturalmente también las del País Vasco, Cataluña, Galicia, Baleares y Canarias.
Y por hoy eso es todo. Espero que no seáis demasiado duros conmígo.
¡Ah, y si queréis hacer preguntas, aquí estoy…»
Y ahí acabó para mi la Rueda de Prensa de Don Felipe, porque en ese momento me desperté… y vi que todo había sido un sueño.
Sí, estos virus y la jaula me están volviendo «majara».
Autor
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Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.
Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.
Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.
En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.
En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.
Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.
Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.
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