24/11/2024 20:13
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Desde la reciente intención de Pedro Sánchez de re-abrir el tema de la memoria histórica con la exhumación del anterior jefe del estado,se nos ha avasallado con un polémico debate que casi se ha convertido en eslogan «Las Cunetas del Bando Republicano», supuestamente se nos ha vendido a modo de mantra progresista que en España hay «miles de cunetas» en las que «Franco supuestamente fusiló sin contemplaciones a «miles de inocentes».
 
A parte de ser una simplificación aberrante y digna de tomar al español medio por estúpido esto es sencillamente mentira,recientemente se hicieron exhumaron 500 fosas de las cuales solo dos eran republicanas.
 
¿Existen fosas en España? Sí, ¿Fueron todas responsabilidad del bando nacional? Rotunda y categóricamente no.
Para adentrarnos más en este tema debemos hacer un ejercicio de contexto en la época en que se produjeron los hechos.
 
En primer lugar durante los años 30 el analfabetismo en España era casi de un 90% mayormente concentrado en el rural,en este ámbito es donde se sitúan la mayoría de fosas comunes de las cuales hay diferentes tipos de muertos.
 
1-Ajustes de cuentas: La guerra en una España rural poco cultivada en la política no dejó de ser un hecho social en que dependiendo de que bando caía la villa o el municipio unos u otros obtenían «carta blanca» para dirimir todo tipo de disputas desde «líos de faldas» «envidias» «conflictos de tierras» etc.
 
2-En los primeros meses de la Guerra los territorios rurales cayeron en un intenso período de desorden, ya que las noticias no llegaban al instante y muchos pueblos se enteraron días y hasta semanas después del pronunciamiento militar en África, produciendo en consecuencia un vacío de poder que llenaban las fuerzas predominantes en el propio pueblo y cuyos hechos desconocían los mismos partidos políticos sobretodo de izquierda asentados mayoritariamente en areas urbanas.
 
3-El avance nacional no permitía en los primeros meses un excesivo control de la retaguardia, pensemos en el General Yagüe o Queipo de Llano o si quieren en el mismo General Miaja que efectuaban ofensivas contra-reloj.
 
4-Los otros muertos,la guerra empuja a dinámicas excepcionales,es decir cualquier militar experimentado tiene que intentar cubrir la retaguardia,en consecuencia (delitos comunes,robos,pillajes y asesinatos se solventaban a pistola)
 
5-Los años 30 en España no destacan especialmente por el el avance de la medicina y si bien ahora con las modernas técnicas de ADN se pueden identificar los cuerpos,hasta mediados del siglo XX y finales no se había desarrollado la técnicas de identificación forense como para poder identificar un cadáver que a lo mejor podía llevar 3 años en descomposición.
 
6-Muertos por fuego amigo,en el campo de batalla no era inusual las muertes por fuego amigo en ambos bandos,bien por malos cálculos de la artillería bien por fusilería obsoleta o por accidentes en el fragor de la batalla o en el avance de las columnas, muchos cadáveres debido a la premura de las ofensivas se dejaron mal enterrados debido a la prioridad de la guerra.
 
7-Purgas en el bando republicano: dedico un punto especial a este aspecto ya que durante la guerra civil española,dentro del bando republicano tanto anarquistas primero como después comunistas se dedicaron a matarse entre ellos, bien por órdenes de Stalin de purgar Trotskistas bien por sospechas de insuficiente ortodoxia con el PCE o bien por puras disputas de pillaje entre anarquistas a los cuales se unieron reos comunes en Madrid y Barcelona que aprovecharon la oportunidad para ajustar cuentas.
8-Desertores, un capítulo quizás olvidado de la guerra fue la de las diferentes redes de deserción que por un módico precio pasaban a Francia para evitar tener que combatir en cualquiera de los dos bandos, estos por supuesto eran enterrados a la intemperie y perseguidos por ambos bandos.
 
9-Insubordinaciones y consejos de guerra entra la propia tropa, entre la tropa rasa no pocas veces en el bando republicano hubo tensiones entre milicias y ejército, lo que acababa en frecuentes fracasos con sus respectivos consejos de guerra y fusilamientos,dicho esto las insubordinaciones la no obediencia a los mandos los intentos de fuga y deserción también se castigaban con el fusilamiento en el bando nacional.
 
10-Extranjeros: La Guerra Civil Española atrajo extranjeros de todo el mundo a combatir con el conocimiento o no de sus familias,éstas muchas veces daban por desaparecidos o muertos a sus familiares y se desentendían de ellos, las tropas nacionales y republicanas tampoco muchas veces podían ni repatriarlos ni saber si su identidad era la real.
 
11-Excesos: En los ejércitos contemporáneos era común castigar los excesos durante los permisos de los soldados que existieron con el fusilamiento para evitar la insubordinación de la tropa y mantener la disciplina.
 
12-Este punto está referido especialmente al General Franco al que se ha responsabilizado de TODAS, las ejecuciones en cunetas,esto militarmente es un disparate en primer lugar porque un General en plena guerra ya tiene suficiente con comandar las tropas y éstas a la vez dependen de subalternos como tenientes,coroneles,sargentos y cabos y en segundo lugar porque de acuerdo al derecho internacional ninguno de los dos bandos firmó la Convención de Ginebra y en tercer lugar porque el General Franco simplemente estaba facultado para conmutar o sancionar las resoluciones de los consejos de guerra,dejando el tema del anterior jefe del Estado sobre el cual abordaremos más profundamente en próximas ocasiones queremos,destacar principalmente uno de los bandos el republicano que se ha otorgado la superioridad moral pero que sin embargo sus representantes internacionales nunca mostraron interés como tampoco sus aliados soviéticos.
 
Por último quiero hacer dos pequeñas reflexiones aclaratorias para que el lector pueda entender el contexto histórico,La primera es que durante la batalla de Gallipolli entre turcos e ingleses no se pudo identificar ni a la cuarta parte de los caídos, y en épocas como la Napoleónica los soldados caídos en combate se les enterraba simplemente en una fosa, la segunda es que cuando se empezó el proceso de beatificación de los «mártires cristianos» por parte de las autoridades pontificias, se tardaron casi medio siglo en investigar si a los que se tenía que beatificar habían muerto a causa de la profesión de su fe o por el contrario las razones de su fallecimiento eran otras.
 
Sin más invito a los lectores de esta página a la reflexión y difusión del texto para sobretodo dejar de lado rencores y no perder la perspectiva de la época en la que se produjo la Guerra Civil Española, soy consciente que para las nuevas generaciones puede ser difícil no entender una época en que las informaciones no llegaban al minuto como actualmente ocurre, pero no podemos ignorar la realidad de los años 30.
 
No quiero acabar este artículo sin disculparme por la extensión y por alguna omisión que en ningún caso ha sido intencional.

Autor

REDACCIÓN