Cada día es mayor el número de ciudadanos que exteriorizan con más énfasis sus quejas por el deterioro que se observa en nuestra sociedad. Un deterioro que se extiende de modo trasversal por la totalidad de sus segmentos.
“La cultura taimada. Perseguido el pensamiento. Despreciada la ciencia. La historia dislocada. Las ideas trocadas en ideologías. Sólo por la ideología el desmán lo justifica el necio. Solo en la ideología el truhan su picaresca asienta.
La familia en subasta.
Lo político y lo criminal fundidos.
La prostitución sostén del gobernante. La droga su aliciente. Sus musas, las putas. ¡Pobres putas! Cuanto asco han de sufrir lidiando bueyes impotentes y castrados cabestros disfrazados de feministas convencidos.
El nepotismo es la norma. Degradados los tribunales. Depravada la escuela. Las cátedras en puja. Los puestos públicos simple mercadería.
La codicia es el norte. El egoísmo es la senda. El otro no existe. Todo se compra. Todos están a la venta.
Sólo el dinero es un dios. Sólo a él se le rinde culto. Sólo a su poder se venera.
Se corrompen a los niños. Se asesina a los aún no nacidos. Se mata a los ya no rentables.
La corrupción todo lo cubre. La mierda todo lo anega. Los esclavos cantan alegres. Los malhechores tocan trompetas.
Y todo un pueblo gozoso canta sus amores con la mugre, la ruindad y la miseria”.
Quizás sea esta situación y el silencio complacido con el cual es contemplada por las gentes de España, la causa por la cual se ha llegado a la conclusión por parte de algunos centros de reflexión sociológica de alto prestigio y contrastada solvencia de que un porcentaje mayoritario de la población Española se encuentra afectada por lo que ha venido en denominarse en los ámbitos de las ciencias humanas P.G.C. (por sus siglas es español)
Llaman PGC estos sabios al proceso de gilipollización colectiva surgido en algunas sociedades humanas cuando estas son sometidas a ciertas variables.
Es nuestra intención tranquilizar a los que acongojados ya empiezan a barruntar una pandemia de PGC en la población española.
Aunque la sintomatología de PGC en nuestra sociedad es intensa no debemos caer en un derrotismo que nos conduzca a pensar que solo somos los españoles los afectados por dicho síndrome..
Ahí tenemos sin ir más lejos a nuestros vecinos franceses, y como la mayor parte de ellos no dan importancia ninguna a las graciosísimas, aunque trágicas en muchas ocasiones, conductas de su presidente.
Y abundando en lo que venimos diciendo; pongamos nuestra mirada en Europa y podremos comprobar que el PGC es una constante a lo largo y ancho de la Unión Europea. En unos países con más fuerza; en otros con menos. Que en España el PGC se manifieste con una agresividad un tanto perturbadora, no nos debe conducir a pensar que es un fenómeno que nos afecte con exclusividad.
De igual forma queremos tranquilizar a nuestros amables lectores informándoles de que ya hace tiempo se viene investigando sobre el EFI (Efecto Flynn Inverso por sus siglas en español) fenómeno que de alguna forma pudiera estar relacionado con el PGC.
Veamos
James Robert Flynn fue un científico estadounidense, que habiendo nacido en 1934 en Washington D.C, emigró a Nueva Zelanda en 1963 permaneciendo en aquella nación hasta su muerte el año 2020.
Su labor científica se proyectó sobre el estudio de la inteligencia humana.
Ha pasado a la historia de la psicología por el descubrimiento de lo que, en su honor, fue denominado el efecto Flynn.
La primera vez que aparece el término “efecto Flynn” en la literatura científica es en la obra de Richard Hernstein y Charles Murray publicada en 1994 bajo el título The Bell Curve.
El efecto Flynn afirma el continuo aumento del CI (Cociente intelectual), generación tras generación, en la especie humana.
No es preciso enfatizar que esta afirmación llenó de optimismo a los conocedores de tan halagüeño hallazgo.
Pero como dice el refrán castellano: Poco dura la alegría en la casa del pobre. Y en este caso los pobres eran los países accidentales.
Pronto surgieron investigaciones que afirmaban que si bien el efecto Flynn había sido universal, manifestándose de modo global; a partir de las postrimerías del siglo XX y los inicios del XXI se ponía de manifiesto en las investigaciones un fenómeno tan extraño como preocupante. En la mayor parte de los países occidentales se podía observar con nitidez un retroceso del CI. Retroceso al cual los investigadores denominarían: “Efecto Flynn inverso”
Las investigaciones llevadas a término por Bernt Bratsberg y Ole Rogebert, en el Ragnar Frisch Center for Economic Research publicada en Proceedings of the National Academy of Sciences, asi lo confirman.
De igual forma quedaba confirmado el fenómeno en un estudio realizado sobre 400.000 estudiantes publicado en la revista Intelligence. Elizabeth Dworak, profesora asistente de investigación en la Universidad Northwestern y una de las autoras del estudio, sostiene, al objeto de tranquilizar a la población, que estos resultados no significan necesariamente que los estadounidenses se estén volviendo menos inteligentes, sino que simplemente están empeorando a la hora de realizar determinado tipo de pruebas. Explicación tranquilizadora que indudablemente confirma, en sí misma, la inversión del efecto Flynn en determinados colectivos.
Y así, en multitud de investigaciones, queda confirmado. Mientras el resto de la humanidad prosigue su incremento en las puntuaciones logradas en CI, en los países occidentales se observa un decrecimiento acelerado de las mismas.
Es muy prematuro aún para afirmar que Occidente se encuentra inmerso en un PGC. Existen indicios, eso sí. ¡Claro que existen indicios! Que los indicios de PGC son observables con especial relevancia en España es indudable. Pero no. Para llegar a una aseveración científicamente fundamentada se requieren más estudios En definitiva seguir investigando. Y por esta necesidad de seguir investigando es por lo que hacemos un llamado especial al gobierno de España para que tome medidas. Medidas concretas. Concienciación de la sociedad. Divulgación de la problemática. Más financiación. Mayores asignaciones económicas. ¡Antes de que sea tarde¡
Tengamos presente que si un gobierno, tal y como prometía su ministra de trabajo doña Yolanda Díaz, es capaz de adaptar los fenómenos meteorológicos a los puestos de trabajo, ¿ cómo no ya a ser capaz de liberarnos del EFI, del PGC y de la MAP (la madre que a ambos pario, por sus siglas en español)?
DEDICATORIA
Nos permitimos dedicar el presente artículo, con nuestro agradecimiento, a ese pequeño grupo de espectadores, que usualmente toman asiento en el tendido 7 de la Plaza de Toros de las Ventas de Madrid. Los cuales con su esfuerzo cotidiano muestran fehacientemente a la multitud que llena el coso, que el EFI ha logrado, incluso, penetrar los ámbitos de las plazas de toros.
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