Llevamos una racha en la que todo está dominado por Venezuela. Todo gira entorno a dicho país y a sus problemas. Los periódicos no tienen, al parecer, otra cosa a la que dedicarse. Los políticos lo mismo. La palabra Venezuela es la que más se pronuncia. Hasta se organizan manifestaciones. En fin, que parece que lo más importante para los españoles es lo que pasa o no pasa o no va a pasar en Venezuela. ¿Y España?
Porque no tendría inconveniente en preocuparme por Venezuela e incluso hacer lo posible por solucionar sus problemas, siempre y cuando en España estuviera todo en orden. Más concretamente ¿ qué rayos me importa a mí Venezuela cuando España, mi Patria, mi nación, está o igual o, en realidad, peor, mucho peor?
España sufre una corrupción y degeneración moral, política, institucional y material brutal como nunca y además desde hace décadas.
España está en manos de una clase dirigente, con independencia de su color político-ideológico, nefasta, repugnante, sustentada contumazmente por los que les votan, que son mayoría.
España sufre una crisis económica, financiera y laboral endémica.
España está atenazada por una inseguridad que crece exponencialmente, sucediendo crímenes que jamás se conocieron por estos lares.
España no posee la menor seguridad jurídica, ni institucional.
España está siendo invadida, literalmente invadida, sin que nadie, nadie, ni tome conciencia real de lo que significa ni menos aún de sus consecuencias a corto –o sea ya-, medio y largo plazo.
España vive en, de y para las mentiras más obscenas.
España es un estercolero maloliente en el que todos optan por taparse la nariz en vez de limpiarlo.
España está siendo descuartizada de forma que ya no la reconoce ni la madre que la parió.
España viene siendo traicionada por sus dirigentes, FFAA, fuerzas policiales, judicatura,…
España… en fin, para qué seguir si ustedes ya lo saben.
¿Y me voy a preocupar por Venezuela? ¿O por el títere ucraniano o por los terroristas palestinos o por las ofensivas israelíes o…?
Pues no, a mí sólo me importa España, España y sólo España, mientras esté como está y más aún mientras vaya a estar peor, que es lo que parece.
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Siento lo mismo que usted. España es lo primero, ahora. Y, después, a gran distancia y una vez que España salga de su gravedad ya nos podremos preocupar por los problemas externos.