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Durante los días 7, 8 y 9 de septiembre de 1936 el diario gerundense Combat. Diari Antifeixista de la tarda, publicó una serie de reportajes bajo el título de Las JONS de Falange, una de las organizaciones fascistas más importantes de España. Un reportaje, aunque ellos no se lo consideraban, fascista y represor sobre una manera de pensar diferente a la de ellos. Es un reportaje fascista desde la primera a la última frase. Es más, sin esconderse, ponen sobre la mesa el nombre de las personas que pertenecían a las JONS y a Falange Española en Gerona. Por eso no es de extrañar que ocurriera lo que veremos al final de esta capítulo. Es un documento interesante para conocer la concepción sectaria de unos que se consideraban en posesión de la verdad, contra aquellos que pensaban de manera diferente. La primera entrega decía:

Comenzamos hoy ha publicar un reportaje sobre las JONS (Juventudes Ofensivas Nacionales Sindicalistas) que al igual que los “balillas” italianos era la juventud fascista encargada de secundar el movimiento subversivo y ayudar a la militarada criminal que se levantó en armas contra el pueblo el día 19 de julio pasado.

Sus consignas asesinas tenían que ser cumplidas al pie de la letra mediante juramentos y adhesiones, sin respetar nada, si hacer un paso atrás, pasando por encima de la sangre del pueblo, pisoteándolo y anidándolo para establecer después una dictadura como la que sufre el proletariado italiano, austríaco y alemán.

El pueblo, pero, con un gesto viril, se ha readecuado contra esta chusma de militares criminales e ineptos, que desde su creación no han tenido más que derrotas.

Esta organización (Falange Española) tenía el movimiento planteado y controlado por los militares y estaba organizado para dar el golpe de mano el mes de agosto, precipitándose pero los sucesos a causa de la muerte de Calvo Sotelo.

En el domicilio del comerciante Adroher Gns. de esta ciudad se encontró tota una serie de reglamentos, actas, fichas de falangistas, juramentos, adhesiones, etc. que los “facciosos” gerundenses habían de respetar, seguir y cumplir estrictamente.

El “jefe” supremo de Falange Española, todos vosotros sabéis era el hijo del dictador Primo de Rivera (¡y tan Primo!) el cual tenia bajo su mando los “jefes” Provinciales y estos, delegados en todas las comarcas.

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El cliché que ponemos a continuación es un nombramiento de los susodichos delegados de las comarcas gerundenses, formado como puede verse por elementos (algunos fugitivos) como el carrocero Vert de Torroella, Fernandito Ferrer de Llagostera, Emilio Picó por Gerona y el aspirante a nadador y atleta de secano Valentín Hache. Todos estaban dirigidos por el abogado de causas injustas Luis Rodríguez.

Estos sujetos se lanzaron, cuando fueron nombrados, a una campaña loca para recoger cuantos adeptos se pusieran a la vista. La búsqueda no fue infructuosa y dio por resultado una demanda de solicitudes considerable. El despacho de los JONS se constituyó en el local de la CEDA, convenientemente amueblado por el comerciante Juan Casellas de esta ciudad. Lo compró el Jefe provincial Luis Rodríguez y costó dos mil ochocientas pesetas.

A continuación ponemos una lista de afiliados a Falange española de las JONS. En ella constan elementos de todas las comarcas. Hay de Palamós como el tal Félix Gubert; de Torroella, de Llagostera, etc. Una mayoría eran de casa buena y otros (¡pobrecitos!) con el delirio de poder figurar se enrolaron como corderos.

Aquí está:

Elementos de Falange Española (todos tienen ficha)

Emilio Picó

José Geli Geli

José Vert Planes

Sebastián Pous Molina

Antonio Bou Borrell

Francisco Pascual Pons

Pedro Ator Callicó

José Bou Bosch

Ángel Pigbet

Francisco Hereu Vidal

Ángel Rodríguez Ballou

Juan Hugas Prats

José Hugas Prats

José Cunill Saura

Vicente Henche

Juan Vilagrán Anglada

José Vázquez

Fernando Castillón Rocafull

José Barceló

Luis María Salvador Sábat

Andrés Delgado Comas

Leopoldo Ortega Monasterio

Fernando Ferrer de Esteve (jefe)

J. Castillón

Carlos Rodríguez

Felipe Moragriega

Joaquín Lloret

Juan Banús

Luis rodríguez Ballou (jefe)

Félix Gubert

Joaquín Ramió

José Cendra

Vicente Cano

Luis Sastregener

Lis Nogueras

Daniel Arnau

José Vila

Rafael Fontana

Jaime Roquet

José María Ripoll

Salvador Ripoll

Garriga (de los vinos)

Turbau

Ramón Mañé

Juan Dallet

Portales

Pérez

Cabarroques

Roberto Roure Guillamet

Manuel Alonso

José Alonso

Donato Fernández

Luis Canosa

Camilo Conde (tradicionalista)

José Batlle

José Carbó Carbó

Arturo Rovira

José Camps

Leandro Camps

José Gutiérrez

Joaquín Regás

El siguiente documento que publicamos es el original  de las fichas que rellenaban todos los que querían ingresar en las JONS de Falange.

Como pueden ver nuestros lectores la fecha del ingreso es reciente, demostrando esto que se encontraban completamente preparados. Las cuotas que se pagaban eran de cinco y dos pesetas mensuales, según las posibilidades económicas de cada uno; esto no quiere decir, pero, que había quien entregaba todo lo que podían para el engrandecimiento de esta organización criminal.

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Hemos visto anteriormente como el periódico Combat habla de Fernando Ferrer de Esteve, que era jefe de Falange en Gerona. Como hemos dicho al principio, el sectarismo provocó lo que explicaremos a continuación. Había nacido en Llagostera en el 104. Fue uno de los primeros falangistas de Gerona y jefe de Falange Española en Llagostera. Desde el principio de la guerra fue perseguido con saña por los partidos de izquierdas. Lo detuvieron y un Tribunal Popular lo sentenció a muerte. El presidente de la Generalidad, Lluís Companys decretó la reducción de condena.

Las palabras de Companys no sirvieron de nada. El director de la prisión de Gerona, el sacerdote Juan Fuster Cuyás, conocido como Rasputín, permitió que un grupo de milicianos entrara a la cárcel y se lo llevaran a La Tallada, junto con otros compañeros de Falange Española. Ha pesar de los actos cometidos durante la guerra civil con individuos que podemos encuadrar dentro del bando nacional, el obispo de Gerona, José Cartañá Inglés consiguió que Franco lo indultara en 1940.

El 2 de febrero de 1939 trece encarcelados en la prisión de Gerona fueron fusilados en La Tallada. Algunos eran padres de hijos movilizados que no se habían presentado a filas y habían sido detenidos como represalia. Las últimas atrocidades se seguirían sucediendo. Sus nombres eran: Fernando Ferrer de esteve, Valentín Costa Anglada, Luis Codina Seriñá, José Martínez Bruquero, Juan Delás Picañol, Joaquín Mir Badosa, Pedro Masdevall Bruguera, Genaro González Chacón, Miguel Juliá Triola, José Salvador Font, Pedro Planagumá Codina, José Simón Compte, Ponciano Ortíz García, y José de Miquel Ronsala.

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César Alcalá