21/11/2024 17:48
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Se trata de dos veteranas citas culturales para los amantes de la literatura que tienen lugar en la ciudad mexicana y la pequeña localidad galesa de Hay-on-Way.

La FIL es el «un gran foco de proyección de la lengua española» desde que comenzó su andadura en 1987 de la mano de la Universidad de Guadalajara. La capital del estado de Jalisco acoge la segunda feria del libro más grande del mundo después de la de Fráncfort, habitualmente congrega a 2.400 editoriales de 45 países y recibe a 800.000 personas. En la edición de este año rinde homenaje a Sharjah y la cultura árabe.

En el Hay Festival cada año se reúnen literatos, músicos, cineastas y otras personalidades del ámbito cultural en un acontecimiento que Bill Clinton calificó como «el Woodstock de la mente», en referencia al mítico festival de música. Nació en 1988 como un pequeño encuentro en la ciudad de los libros (Hay-on-Way) y ha viajado desde el Reino Unido a otros lugares con ediciones en Segovia, Cartagena de Indias, Medellín, Arequipa o Querétaro.

Ambos eventos congregan cada año a cientos de miles de visitantes «para fomentar entre ellos el hábito de la lectura», según recoge el acta del jurado que, como consecuencia de la pandemia, ha presidido de forma telemática Víctor García de la Concha.

Para el jurado, la FIL y el Hay Festival merecen el premio porque representan «los más importantes puntos de encuentro del libro, los escritores, los lectores y la cultura en el mundo» y contribuyen decisivamente » a fortalecer las industrias culturales y a hacerlas sostenibles«

Tercer galardón de los premios de 2020

El de Comunicación y Humanidades ha sido el tercer galardón en fallarse este año, después de la concesión del Princesa de la Concordia a los sanitarios por su entrega y sacrificio para hacer frente a la pandemia del coronovirus y del Princesa de las Artes a los compositores de bandas sonoras Ennio Morricone y John Willians por enriquecer con su talento cientos de películas.

LEER MÁS:  Los libros libres y viajeros, y el virus de la lectura. Por Manuel I. Cabezas González

El pasado año, el Premio Princesa de la Comunicación recayó en el Museo del Prado que celebraba su bicentenario y en otras ediciones ha premiado a figuras como la reportera mexicana Alma Guillermoprieto, el sexteto argentino de Les Luthierso el fotoperiodista estadounidense James Natchwey.

Cada premio Princesa de Asturias está dotado con la reproducción de una escultura diseñada por Joan Miró, 50.000 euros en metálico, un diploma y una insignia. El galardón de Comunicación y Humanidades reconoce “la labor de cultivo y perfeccionamiento de las ciencias y disciplinas consideradas como actividades humanísticas y de lo relacionado con los medios de comunicación social en todas sus expresiones”

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