El IOR o las finanzas vaticanas. Por Claire Gruié

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En el corazón del Vaticano se encuentra el IOR: el Instituto para las Obras de Religión, en una antigua torre fortificada (de la época de Nicolas V) permanentemente custodiada por la Guardia Suiza. La ciudad del Vaticano alberga 3 instituciones financieras: el Patrimonio Apostólico que hace las veces de banco central, el Ministerio de Economía y el IOR. Resulta curioso que un Estado de tan solo 800 habitantes necesite de 3 instituciones de gran calado. El IOR fue fundado por el Papa Pío XII en junio de 1942. Bernardino Nogara había centuplicado el patrimonio de la donación de Mussolini de 1750 millones de liras. Convenció a Pío XII de no depender de los bancos italianos para que la Santa Sede tuviera su propio banco.

Esta institución funciona de manera autónoma y puede transferir fondos a cualquier parte del mundo, sin límite de cantidad y con total opacidad en las transacciones. Cuenta con unos activos que se cuantifican en miles de millones de dólares. Ningún órgano, ni dentro ni fuera del Vaticano, ha sometido nunca al IOR a una auditoría. Es el banco del Papa que es el único y exclusivo accionista. Lo controla él y a él le pertenece.

En los años 70, Michele Sidona, conectado con la mafia, apodado “El Tiburón de los negocios” y verdadero amigo del Papa Pablo VI, sirvió de intermediario entre el dinero que la CIA aportaba al Vaticano y la Democracia Cristiana a fin de impedir el comunismo en Italia. Pablo VI otorgó a Sidona poderes casi ilimitados sobre los fondos administrados por el IOR y trabajó al lado del arzobispo Paul Casimir Marcinkus, presidente del IOR desde 1971. En la primavera de 1969, el gobierno italiano decidió gravar con impuestos las inversiones del Vaticano. Sindona propuso sacar el dinero de Italia y desviarlo a paraísos fiscales europeos y americanos.

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Tenía vínculo con uno de los mafiosos y narcotraficantes más importantes de Estados Unidos: Vito Genovese, apodado “jefe de todos los jefes” (Nueva York).

En esta época, el triángulo mafia-Democracia Cristiana-Iglesia fue el principal responsable de la pobreza en Sicilia. Mafiosos, políticos y clérigos luchaban juntos en contra del comunismo. Allí se formó Michele Sidona y terminó manejando los beneficios del tráfico de heroína obtenidos por la familia Corleonesi entre otras.

Recogía los miles de millones de dólares con una mano en Estados Unidos y Sicilia y con la otra, los depositaba en los bancos de Suiza completamente limpios.

Luego se transfería el dinero al IOR que era titular del 20 por ciento de las acciones del banco suizo: “Banque de Financement”.

El IOR se ha visto inmerso en numerosos escándalos desde la polémica dirección de Paul Marcinkus. Hoy existen una treintena de cuentas intocables ligadas a paraísos fiscales y a los servicios secretos estadounidenses. Maduro, Diosdado Cabello Rondon (militar y político venezolano) y Maria Gabriela Chávez: la hija del extinto dictador tienen centenares de millones de euros en el IOR. Al igual que Juan Manuel Santos, el ex-presidente de Colombia, Cristina Fernandez de Kirchner, Lula Da Silva, Evo Morales, Rafael Correa, Raul Castro y Daniel Ortega.