La destrucción sistemática. Por Alejandro Descalzo

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Llevo un tiempo contemplando como en un silencio frío y atroz están llevando a cabo la destrucción de conventos y colegios que bajo pretexto de lo más peregrino cierran para siempre lo que llevaba abierto siglos. Están acabando con la referencia de muchas gentes, entre las que me incluyo, que estudiaron y se formaron en esos centros religiosos que de manera cobarde y sin razones técnicas fulminan acelerando su triste final.

El último hecho de hace pocos días es el anuncio del cierre del colegio de La Purísima Concepción, en la calle de La Puebla, 20, en Madrid. Uno de los colegios más antiguos de la capital perteneciente a la Hermandad del Refugio. Este colegio fue construido en 1651 con el motivo principal, de ahí lo del refugio, de dar ayuda a las niñas huérfanas de la ciudad. Después de más de 300 años de actividad caritativa y formativa, las autoridades de la capital deciden cerrar el colegio por razones técnicas ¿Cuáles? Dicen que las instalaciones no están preparadas para impartir la educación del siglo XXI… ¡Acabáramos! Después de algunos siglos de actividad escolar formando a críos sin recursos, ¿este colegio no tiene no sé qué historia inventada por esta gentuza que nos gobierna y por eso se cierra? ¿No será que se han enterado de que en estos colegios no se dan clases de masturbación? Digo yo. El Refugio también da de comer diariamente a más de 250 personas necesitadas todos los días. ¿Han visto ustedes en las puertas de CCOO, UGT, PSOE, PP, VOX, PODEMOS alguna vez colas de personas hambrientas de pan y misericordia? Yo no, pero si quieren ver esas colas de gentes heridas en las puertas de conventos y centros como el Refugio, los podrán ver aquí con toda seguridad. Les recuerdo que quien gobierna el Ayuntamiento y la Comunidad es el PP. Recordarles también que el alcalde Almeida ha dado 5 millones de euros a los/as maricones/as para la celebración del aquelarre de su asquerosa e inmoral fiesta del «orgullo», y que el 23 de julio se repite el simulacro del reparto bochornoso de poltronas y sueldazos.

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Después de estos puntuales recuerdos retomo el sentido de este artículo. Hace menos de un mes han cerrado el colegio convento de San Plácido, fundado en 1623 y que, entre otras joyas, aparte de su actividad formativa, guardaron el Cristo de Velázquez en su iglesia, concretamente en su sacristía durante varios siglos hasta su actual ubicación en el Museo del Prado Yo hice la primera comunión en él y mi hermana y yo fuimos alumnos del colegio. Las causas del cierre, falta de monjas ¿De verdad nos toman por tontos? ¿Faltan monjas y en vez de reponer personal, lo cierran? ¿Y la Iglesia calladita?

Se cargaron el colegio de San Antón y convirtieron su iglesia en una narco-sala y así continua en manos de» un pájaro» sin sotana ni alzacuellos en traje y corbata roja. Enfrente justo de este «enjuague» estaba el convento de las Recogidas de María Magdalena, también abierto a primeros de 1600, su labor recoger a mujeres arrepentidas y excluidas de la sociedad. Se convirtió en una sede de la UGT, aunque hoy día está cerrado y abandonado. Los que mataban y violaban a monjas convirtieron sus instalaciones en un tremendo insulto y su iglesia en un salón de actos.

Da igual derecha o izquierdas, sus hojas de ruta son caminar sin pausa hacia una sociedad global y secularizada. Acabar con cualquier vestigio religioso y moral. Empezaron eliminando las cruces de los colegios y ahora de las calles y acabarán persiguiéndonos. Destruyéndonos sistemáticamente si no empezamos a despertar para defendernos de esta atmósfera narcotizada.

Autor

Alejandro Descalzo: Nace en Madrid en 1958. Estudia en Los Escolapios de San Antón. Falangista. Ha publicado 4 libros de relatos. Apasionado del cine y la lectura. Colaborar en este medio lo considera un honor.

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