Getting your Trinity Audio player ready...
|
Han pasado 84 años, de una Guerra contra el Comunismo Criminal, la Masonería, la Anarquía, el Crimen organizado, … y se impuso la Victoria contra el Comunismo bolchevique de la URSS
Nunca hay que olvidar que el General Invicto en vida, fue el único que verdaderamente hizo sucumbir al comunismo aberrante del crimen
La mayoría de los españoles, la llaman Guerra Civil, aunque la realidad, si bien fue civil, se considera como Guerra de Liberación. Y su nombre indica claramente, que el Bando Nacional, liberó a los españoles de la opresión comunista, hereje y criminal
Dicha contienda puede decirse que fue fratricida, pero nunca entre hermanos, aunque si entre parientes, muy allegados, porque sus pensamientos y creencias eran opuestamente distintos
La maravillosa y democrática 2ª Republica Bolchevique, empezó con asesinatos, incendios, quema de conventos, de libros incluso incunables y todo tipo de aberraciones a la población indefensa, en el mismo momento y día de su fundación, allá por el 14 de Abril de 1931
Es mentira que la Guerra empezara el 18 de Julio de 1936, como es mentira, que fue una sublevación contra un Régimen democrático estableció.
La Guerra la impuso un solo Bando, “El Rojo”, sin que otro Bando existiera y menos, se sublevara, durante 5 largos años, sufriendo todo tipo de amenazas, desmanes y asesinatos
Los abominables crímenes que sufrió la población, desde la promulgación vandálica del estado soviético-criminal-masón-anarquista, fue de una virulencia terrible, para las gentes inocentes y de buena voluntad, que soportaron todo tipo de venganzas, refriegas y asesinatos indiscriminados.
En la actual España pre-bolchevique, se habla de los muertos por el Régimen franquistas, pero sin embargo se acallan, los miles de asesinatos y ejecuciones por un frente popular armado, como diabólicos gudaris de un Régimen que representaba la “Hoz y el Martillo”, que nunca ninguno de ellos la utilizó, para trabajar y sí para cortar cuellos a incautos e inocentes transeúntes
Tanto fue así, que los ROJOS, como querían que se les llamaran, mataban por las cosas mas nimias, que podemos pensar:
Asesinaban a católicos, con el tiro en la nuca, por el hecho de ir a una iglesia a rezar.
Asesinaban por el hecho de saludar, con un: “Adiós”, en lugar de “Salud”
Esos “demócratas”, profanaban las sepulturas de todas las iglesias y sacaban sus cadáveres a la puerta de la iglesias, junto a imágenes Sagradas, Cristos crucificados, Vírgenes, cuadros representado imágenes de Santos, … y luego hacían el tiro al blanco, como diabólicos hijos de Satanás y miserables engendros, salidos de los infiernos.
Pero no solo eso, sino que la quema de iglesias, conventos, catedrales, … y cualquier edificio católico, estaba a la orden del día.
Y por si fuera poco, esa turba miserable, en la que la derechona infame y traidora ha admitido, que son la “esencia de la inteligencia, de la sabiduría y de la cultura”, arrasaban con bibliotecas y sacaban todos los libros al centro de la calle, para quemarlos, con el divertimiento y algarabía de esos monstruos, envenenados por el odio, leninista y estalinista. Lo mismo daba que fueran libros de cultura, de historia, de ciencias, …, todo era pasto de las llamas, incluso libros incunables de una antigüedad y valor artístico único.
En esta situación prebélica, esta panda de desalmados, profanadores y talibanes, que impusieron su tiranía durante 5 largos años, con soporífero aguante de ciudadanos y militares, llegó a su cenit de aguante, cuando en el Congreso de los Diputados, el 16 de junio de 1936, justo un mes antes de los primeros movimientos del golpe militar contra el gobierno de la República en el Protectorado de Marruecos, el diputado de la tradicionalista Renovación Española D. José Calvo Sotelo, pronuncia ese histórico discurso en el Congreso de Diputados que ofrecemos ligeramente extractado. En él ya anticipa un levantamiento castrense del que tanto el presidente de la República, Manuel Azaña, como el presidente del Consejo de Ministros, Santiago Casares Quiroga, estaban al corriente por informes de carácter reservado.
Lo novedoso es lo que era un secreto a voces, en el seno del gobierno del Frente Popular llegase de forma abierta a las Cortes para entrar en el debate político y encrespar, aún más la tensión que se vivía en la calle. Hasta el punto de alentar numerosos altercados que se sumaban a una ola incesante, e incluso el asesinato del propio Calvo Sotelo, apenas unos días después, la madrugada del 13 de julio, a manos de un grupo armado socialista. Su verdugo habría sido, según diversos historiadores, el guardaespaldas del entonces diputado y ex ministro del PSOE Indalecio Prieto.
El discurso de Calvo Sotelo, expresa una confesión de lo que él creía que iba a suceder con su propia vida, diciendo:
“Yo digo lo que Santo Domingo de Silos, contestó a un rey castellano”:
¡Señor, la vida podéis quitarme, pero más no podéis y es preferible morir con gloria, a vivir con vilipendio!
Debate en Cortes: Gil Robles, Pasionaria, Calvo Sotelo
En la contestación a Casares, Calvo Sotelo afirmó que la afirmación del presidente del gobierno de hacerle «máximo responsable» de una posible sublevación, eran «palabras de amenaza» en las que se le había convertido en sujeto no solo activo, sino pasivo, de hechos que decía desconocer. Sin embargo, acto seguido afirmó que aceptaba «con gusto» las responsabilidades que se pudiesen derivar de sus actos, si eran para el bien de su «patria» y para «gloria de España», tras lo cual lanzaría una advertencia a Casares para que también midiese sus responsabilidades, puesto que en sus manos estaría el «destino de España»:
«Yo tengo, Sr. Casares Quiroga, anchas espaldas. Su señoría es hombre fácil y pronto para el gesto de reto y para las palabras de amenaza. Le he oído tres o cuatro discursos en mi vida, los tres o cuatro desde ese banco azul, y en todos ha habido siempre la nota amenazadora. Bien, Sr. Casares Quiroga. Me doy por notificado de la amenaza de S.S. Me ha convertido su señoría en sujeto, y por tanto no sólo activo, sino pasivo de las responsabilidades que puedan nacer de no sé qué hechos. Bien, Sr. Casares Quiroga. «Lo repito, mis espaldas son anchas; yo acepto con gusto y no desdeño ninguna de las responsabilidades que se puedan derivar de actos que yo realice, y las responsabilidades ajenas, si son para bien de mi patria (exclamaciones) y para gloria de mi España, las acepto también. ¡Pues no faltaba más! Yo digo lo que Santo Domingo de Silos contestó a un rey castellano:
‘Señor, la vida podéis quitarme pero más no podéis». Y es preferible morir con gloria a vivir con vilipendio.
Extracto del Diario de Sesiones de las Cortes Españolas del 16 de junio de 1936.
La diputada del Partido Comunista de España Dolores Ibárruri (conocida como Pasionaria) afirmó en esta sesión, refiriéndose a Calvo Sotelo y Martínez Anido, que era una vergüenza que en la República todavía no se les hubiese juzgado, refiriéndose a sus responsabilidades como ministro de la dictadura de Primo de Rivera y como organizador de la guerra sucia contra el sindicalismo anarquista, respectivamente. Tarradellas, en una entrevista, acusó también a Dolores Ibárruri de exclamar en esta sesión, dirigiéndose al diputado monárquico:
«Este hombre ha hablado por última vez».
Sin embargo, la controvertida frase no aparece en el Diario de Sesiones e Ibárruri siempre negó haberla proferido. No obstante, el historiador y parlamentario en aquella época Salvador de Madariaga sostiene la veracidad de dicha cita, aunque modificada sustancialmente, en la página 384 de su libro España. Ensayo de historia contemporánea (11ª edición revisada por el autor en 1978) y que dice: «Dolores Ibarruri, Pasionaria, del partido comunista de las Cortes, le gritó:
Este es tu último discurso. Y así fue».
El ambiente en las Cortes era tal, que al terminar la intervención de Calvo Sotelo, Julián Besteiro comentó:
«Si el gobierno no cierra el Parlamento hasta que se aquieten las pasiones, seremos nosotros mismos los que desencadenaremos, aquí dentro, la guerra civil»
Terminado su discurso, una vil republicanista bolchevique, al término de la alocución de D. José Calvo Sotelo, saltó con esa famosa y lapidaria frase:
Sr. Calvo Sotelo esta es la última vez que habla ante esta cámara
Mitos al descubierto – El asesinato de Calvo Sotelo
ASESINATO DE CALVO SOTELO
Mitos al descubierto – La masacre de Paracuellos de Jarama
La cobardía y el crimen de inocentes que ese populacho asesino, llevaba en su sangre, llegó a tal extremo de asesinar vilmente a presos, como venganza, al ver que el Bando Nacional, al Mando del General, con la espada más limpia de Occidente, asomaba por las puertas de Madrid
Las matanzas de Paracuellos
El último parte de la guerra civil española fue firmado por el general Francisco Franco el 1 de abril de 1939 en un folio con el membrete del «Cuartel General del Generalísimo. Estado Mayor». Es un breve texto muy famoso en España; de forma literal, las palabras manuscritas por Franco son las siguientes:
“En el día de hoy, cautivo y desarmado el Ejército Rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares.
La guerra ha terminado.
El Generalísimo Franco
Burgos, 1° Abril 1939.
Caída de Madrid. La guerra ha terminado 2.wmv
Autor
-
Empresario. Licenciado en Marketing y en Dirección de Ventas. Escritor de varios libros, sin publicar, aún. Aficionado a la escritura y a la historia de España.
Caballero Legionario que fue del IV Tercio Sahariano Alejandro Farnesio, en dónde estuvo en Mando Bandera. Escogido para portar al Santo Cristo de la Buena Muerte, representando a la Xª Bandera.
Congregante del Santísimo Cristo de la Fe, Cristo de los Alabarderos y María Inmaculada Reina de los Ángeles, en la Catedral de las Fuerzas Armadas
Luchador nato por el Valle de los Caídos y sus monjes Benedictinos, por nuestro Cristo Redentor, la Familia, contra el Aborto y la Patria Grande, Unida y Gloriosa, desde la muerte del General Invicto.
Amigo, seguidor y admirador de la figura más transcendental y entrañable del siglo XX español, D. Blas Piñar, mi Caudillo, siempre junto a él, tuve el honor de aplaudirle, ovacionarle, dialogar y abrazarle, porque era mi ídolo y lo seguirá siendo por toda la eternidad. Y tengo el orgullo, que de sus magníficos libros escritos, poseo unos diez, dedicados, con cariño y con su pluma de oro, como escritor en la excelencia.
Últimas entradas
- Actualidad12/11/2024Bertrand Ndongo, un valiente vituperado y agredido por hienas radicales. Por Miguel Sánchez
- Actualidad07/11/2024Valencia: La diferencia de trato y ejecución entre la riada del año 1957 y la del 2024. Por Miguel Sánchez
- Actualidad03/11/2024¡España está en riguroso luto! Valencia como una “zona de guerra”. Por Miguel Sánchez
- Actualidad30/10/2024El corrupto Sánchez desaparecerá de nuestras vidas un día… ¿Y después qué? Por Miguel Sánchez
Miguel, ¿cómo es que en tu «currículum» actual ya no mencionas a Blas Piñar?