Eduardo López Pascual analiza su obra Timbres en la puerta. Por Javier Navascués

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Eduardo López Pascual. Nacido granadino en Baza en 1939, murciano de corazón al vivir en Cieza, es profesor de EGB y de Institutos técnicos y escritor vocacional con más de 20 obras en prosa poesía, teatro y ensayo. Creador de los premios internacionales de poesía Luis Santa Marina y presidente de la asociación cultural Pueblo y arte.

¿Qué supone este libro dentro de su dilatada trayectoria como escritor?

Bien, siguiendo a mi héroe personal, que no es otro sino José Antonio Primo de Rivera, quiero ser escueto en mis respuestas, porque tampoco se trata de dar aquí un discurso literario. En este sentido le diré que “Timbres en la puerta”, significa un paso importante en mi defensa, irrenunciable, del honor de las personas, y de la Justicia en su versión más autentica, libre de cualquier ingeniería oficial y artificiosa.

¿Por qué su prologuista define su novela, de temática judicial, como un libro comprometido?

Creo que cuando un libro, de la temática que sea, levanta uin alegato contra el discurso social, cultural o políticamente correcto- tal como se entiende hoy, su texto pasa a ser sin duda, una acción comprometida, expuesta a los exabruptos del sistema. Y verazmente, mi novela ofrece una contestación urgente a una justicia injusta.

¿Qué referencias y fuentes de inspiración ha tenido?

Pues la vida misma. Los hechos que el mundo judicial nos descubre sentencia tras sentencia, en asuntos tan delicados como los derivados de la Violencia de género, los casos de discriminación negativa. y las resoluciones que se publican de juicios sobre esos temas.

El título timbres en la puerta, suena inquietante…¿Por qué el ser humano se sobrecoge ante el estridente sonido del timbre? Suele ser presagio de algo malo muchas veces.

Supongo, porque no soy especialista en la materia, que viene de un temor atávico a las llamadas intempestivas e inesperadas; mucho, más si se producen a horas absolutamente fuera de lugar.

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¿En qué medida el argumento sigue o se inspira en algún caso real?

No necesariamente en ningún auto en particular, sino en el rosario de casos en que la justicia, sometida a criterios de oportunidad política, cubierta por una ley que considero como muchos juristas inconstitucional, acaba en acusaciones y en condenas que en nada comparece con la verdad.

Usted ha cultivado el teatro, ¿En qué medida su novela con tanto diálogo se podría adaptar al teatro?

Con 17 años ya me atrevía a fundar y dirigir un Teatro de Ensayo -claro que juvenil-, con obras de Becker, Ionesco, o el español Martin Iniesta. De ahí mi amor por la escena, y pienso que “Timbres en la puerta”, con su argumento dialogado, podría adaptarse al teatro. Recuerdo al efecto, la obra de Lauro Olmos, “La camisa”, en que un caso administrativo, lo transformó en un hecho teatral de indudable interés. Si, creo que mi novela pudiera convertirse en una pieza para el teatro.

Hoy en día, merced a la ideología de género, el término agresor lo quieren asociar al varón.

Precisamente este es el hijo conductor de mi novela, el hecho contrastado en denuncias y en opiniones profesionales, de un carácter discriminativo a favor del mal llamado feminismo, que invierte la carga de la prueba.

Importante la palabra presunto, muy usada en el lenguaje jurídico, mientas no hay sentencia.

Un término en la jungla judicial que aun siendo técnicamente incuestionable, lamentablemente es usado o abandonado por las fuerzas políticas de manera obscena.

Además del entretenimiento y la intriga…¿Tiene alguna pretensión moralizante?

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Más bien un deseo restituyente, como es que la Justicia vuelva a una praxis moral y éticamente justa, y que los ciudadanos estén alerta a su posible manipulación.

¿Por qué recomendaría leer su libro?

Sinceramente, acaso por extender la idea de que hay que estar en vigía, a las legislaciones que se aprueban al dictado de una ideología, que no responde a los principios de veracidad y de imparcialidad. Las leyes de Memoria y de Género, vigentes demuestran la urgencia de nuestra protesta y justifican libros como “Timbres en la puerta”.

Autor

Javier Navascués: Subdirector de Ñ TV España. Presentador de radio y TV, speaker y guionista.

Ha sido redactor deportivo de El Periódico de Aragón y Canal 44. Ha colaborado en medios como EWTN, Radio María, NSE, y Canal Sant Josep y Agnus Dei Prod. Actor en el documental del Cura de Ars y en otro trabajo contra el marxismo cultural, John Navasco. Tiene vídeos virales como El Master Plan o El Valle no se toca.

Tiene un blog en InfoCatólica y participa en medios como Somatemps, Tradición Viva, Ahora Información, Gloria TV, Español Digital y Radio Reconquista en Dallas, Texas. Colaboró con Javier Cárdenas en su podcast de OKDIARIO.