La Guardia Civil ha informado que en la tarde del viernes se estableció un dispositivo en el Puerto para identificar a los ocupantes de varias embarcaciones de alta velocidad. En el momento de acercarse a las embarcaciones, una de ellas embistió brutalmente contra la patrullera del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, ocupada por seis agentes. Como resultado de la embestida, han fallecido en en el acto dos agentes, uno del GEAS y otro del Grupo de Acción Rápida (GAR); un tercero herido grave murió poco después.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha lamentado «profundamente» los trágicos hechos ocurridos en el Puerto de Barbate (Cádiz) este viernes, donde una narcolancha arrolló a una embarcación de la Guardia Civil, resultando en la muerte de tres agentes y dejando a otros tres heridos, dos de ellos en estado grave. La AUGC ha exigido al Ministerio del Interior «una profunda investigación» de estos hechos «gravemente ocurridos».
Además, la Asociación Profesional de Guardia Civil Jucil ha pedido el cese en el cargo de Grande-Marlaska tras este «asesinato salvaje» en el que tres agentes perdieron la vida. Jucil exige la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, así como una respuesta rápida y contundente para detener y evitar el crecimiento de las mafias que han adueñado de la desembocadura del Guadalquivir.
Por otro lado, la asociación profesional Justicia para la Guardia Civil había pedido más medios y un mayor número de efectivos para controlar el paso de la droga por la desembocadura del Guadalquivir el 1 de febrero pasado. Este sábado se han detenido a tres individuos que formaban parte de la narcolancha que, tras embestir, causó la muerte de dos guardias civiles el viernes por la noche. La investigación ha avanzado rápidamente.
Marlaska suma y sigue en malignidad. Actúa como un comisario político de los peores tiempos del comunismo asesino.
Descansen en Paz y caiga todo el peso de la Ley sobre los salvajes asesinos.
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Que nadie se lleve al engaño judío hipócrita fariseo. Los asesinos de esos guardias civiles no solo son los narcotraficantes en lancha o los que hay aquí, en España. Los asesinos de esos guardias civiles son los millones de españoles que consumen esas drogas. Sin demanda no hay droga que valga. Además, no se actúa nunca contra los que consumen tales sustancias adictivas, publicando su DNI, nombres y apellidos, para que todo el mundo sepan quienes son y tenga repercusión sobre ellos, desanimando así a cualquier consumidor potencial, especialmente los jóvenes. Para acabar con la droga no basta con gastar decenas de millones persiguiéndoles infructuosamente por el Estrecho de Gibraltar o en las costas gallegas o andaluzas, no. Hay que castigar a quien consume esas drogas. Por culpa de su capricho mueren muchos guardias civiles y policías en la lucha contra los narcotraficantes, además de gastarse cantidades enormes de dinero público robado con impuestos. Hay que hacer pagar ya al consumidor de las drogas el daño irreparable que hace su egoísmo enfermo, adictivo, esclavista y esclavizador y sus horribles consecuencias. Hay que destruir los mercados de droga mundiales destruyendo la reputación social de quienes consumen estas sustancias, aunque sean la mayoría de diputados. Que los policías y guardias civiles filtren los nombres y apellidos de políticos que sorprenden con cannabis, cocaína, heroína y demás drogas. Que España se entere de los yonkies que dirigen gobiernos, corporaciones, multinacionales, grandes empresas y ocupan puestos de responsabilidad. Ya va siendo hora de actuar como lo haría Adolf Hitler en Alemania contra toda perversión contra la raza de los justos.