1- La película «El niño con el pijama de rayas» nos muestra, en la figura del padre del niño alemán protagonista, el ejemplo perfecto de un psicópata integrado o socializado. Un padre amantísimo, un esposo ideal y un compañero leal con los suyos, es a la vez un sádico asesino capaz de someter sin escrúpulos ni remordimientos (como jefe de un campo de concentración) a otras personas a las torturas más crueles, abyectas e inhumanas que se pueda imaginar.
2- Si bien hay una fuerte evidencia contrastada de que el psicópata integrado es innato, también hay bastante evidencia de que es una característica que adquieren algunas personas en el marco de condiciones de vida particulares. Este hecho precisamente refleja que no todos podemos ser psicópatas integrados, si no que con toda probabilidad esta es una condición que son capaces de adquirir solo algunos individuos (1% de la población) cuando la vida los conduce por situaciones que hacen que se desarrolle dicha cualidad.
3- Estamos hablando de la adquisición de un control emocional tan descomunalmente poderoso que los capacita para inhibir y anular algunos de los rasgos más fuertes y contundentes de la emocionalidad humana como la compasión, la empatía, la piedad, la culpabilidad, el cariño, el miedo, el remordimiento, la inseguridad, la solidaridad, la vergüenza, la preocupación o el interés por los otros cuando el sujeto lo estima conveniente. Esta supercapacidad para someter y controlar sus emociones unida a una más que destacada cualificación para ser capaces de descubrir exactamente qué es lo que tienen que hacer y decir en cada momento para camelarse al prójimo; los convierte en seres afables, cordiales, encantadores y sumamente seductores, en individuos capaces de despertar en los otros profundos sentimientos de aprecio, estima y cariño hacia ellos. Esto convierte a los psicópatas integrados en los mejores padres, los hermanos perfectos, los hijos amados, el compañero de trabajo insustituible y los amigos del alma (repito, siempre y cuando al psicópata integrado le convenga).
4- Los sentimientos de aprecio, cariño, gratitud, comprensión y solidaridad que los psicópatas integrados despiertan en quienes les rodean consiguen que estas personas sientan la imperiosa necesidad de hacer por estos todo lo que él «buen amigo» les sugiera o pida, además de que experimentan una poderosísima sensación de satisfacción y bienestar cuando han complacido al supuesto amigo del alma.
Hecho que le confiere al psicópata integrado la potestad de controlar, manipular y dirigir la vida de todo el que le rodea en la dirección que más le beneficia a él.
5- Aunque los psicópatas integrados van dejando detrás de sí un reguero de víctimas inocentes a las que han mentido, estafado y traicionado para terminar desplumándolas o para usarlas como pedestal en función de ascender socialmente, los psicópatas integrados normalmente no delinquen y menos cometen crímenes con sus propias manos. Su actuación siempre se desenvuelve en el límite de la legalidad vigente. Y cuando las leyes no se avienen a sus intereses, las cambian. Sí, cambian las leyes, porque los psicópatas integrados muy pronto descubren que esa capacidad superlativa para conseguir que las personas que les rodean terminen siempre haciendo de buen grado lo que ellos quieren, les permite convertirse en líderes indiscutibles de cualquier grupo social del que formen parte y debido a esto muchos de ellos terminan dedicándose a la política, llegando en infinidad de casos a las cotas más altas del poder.
Conclusión: amigos, como psicópatas integrados son destacados los casos de Stalin, Mao Tse Dong, Pol Pot, Ceaușescu, Largo Caballero, Carrillo, Honecker, hermanos Castro, Hitler, Chávez, Maduro, Guevara y una interminable lista de criminales genocidas que mandaron a asesinar en nombre del social-comunismo a muchos millones de personas.
En el caso que nos ocupa podemos decir, sin lugar a dudas, que Pedro Sánchez cumple fielmente con todas las características y su personalidad tiene todos los rasgos propios del psicópata integrado:
a- Ya que es alguien que es totalmente ajeno a emociones humanas como la culpabilidad, la vergüenza, la preocupación o el remordimiento cuando engaña, miente, tergiversa, manipula o traiciona a los españoles.
b- Ha sometido a su voluntad a todo un conglomerado de personas (el actual PSOE) dispuestas a mentir y a traicionar, arruinando su propia credibilidad y reputación por estar a bien con el líder supremo.
c- Y sobre todo, Pedro Sánchez es un psicópata integrado de manual porque se enorgullece jactancioso de la comisión de actos tan inicuos, execrables y aberrantes que avergonzarían para toda la vida a cualquier persona mínimamente normal.
d- ¿Qué le falta convertirse en un genocida de su propio pueblo? Tranquilos, que ya va en camino de ello, solo hay que darle tiempo si no se le paran los pies.
Lecturas de consulta.
Robert D. Hare. Home. Psychopathy, Affect and Behavior.
Robert Hare and Paul Babiak. ‘Snakes in Suits’.
Andreas Wilmes. 2014 ¿Es la psicopatía un concepto coherente? Bases neurológicas y responsabilidad moral. PSN Número 1 páginas 31 a 49.
José Manuel Pozueco-Romero, Juan Manuel Moreno Manso, Macarena Blázquez Alonso, Ma. Elena García-Baamonde Sánchez. 2013 Socialized/subclinical psychopaths in intimate partner relationships: Profile, psychological abuse and risk factors. Psychologist Papers 34(1):32-48
Autor
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Hernán Pérez Ramos es un acertado analista sociopolítico caracterizado por su laconismo sustancial que brinda una comprensión diáfana de las situaciones que revisa en su apartado de ÑTV ESPAÑA: Análisis a vuelapluma.
Es un experto en Raíces Biológicas de los comportamientos humanos y autor de un libro con una nueva teoría de la evolución humana.
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Has escrito bobadas de los «campos de conncentración», todo por ver películas de Hollywood!