21/11/2024 15:22
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El señor Putin siempre justifica de alguna manera el estar al lado de China por haberle »echado» o tratado de forma despectiva tanto a él como a Rusia, por parte europea y sobre todo norteamericana. Vale, te puede no gustar la UE o los Estados Unidos y su política pero, hasta cierto punto… ¿Acaso no es algo mejor que la China o la norcoreana?. ¿Cuántos derechos y libertades individuales protege China? ¿Y su »colonia» norcoreana? ¿Eso es lo que quiere el señor Putin para el mundo, el programa chino? Lo que está claro es que aliándose y colaborando estrechamente con esos países está, por un lado, fortaleciendo a China siendo encima su títere (como ahora en Ucrania), y por el otro, la visión que se va a tener de Rusia actualmente y en los próximos años no va a ser mejor ni nada buena, va a ser parecida a la del período soviético, justo cuando ya se tenía una imagen distinta de Rusia.

También nos venden por ahí que el señor Putin va en contra de las ideas perniciosas del NOM (¿ quién no nos dice que China puede estar patrocinando entre bambalinas ese NOM?), avaladas por la UE, que simplemente vienen a destruir todo lo destruible a nivel social y nacional, aunque ciertamente poco queda ya por destruir en Occidente, por lo menos a nivel social. Bueno, vale, acepto pulpo como animal de compañía, pero… ¿Cuál es la alternativa a la UE y a la OTAN? ¿Una organización en la cual esté entre otras China y Corea del Norte? ¿Qué agenda tiene para el mundo China, señores? Que se lo pregunten a los habitantes de Hong Kong. ¿Y Corea del Norte? ¿Es mucho mejor que la estadounidense o la europea?

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Estoy de acuerdo en que la UE hay veces que da la sensación de ser un organismo para que Estados Unidos »mangonee» sus »colonias» europeas. Y la OTAN como el brazo armado del imperio yankee. Y la plutocracia a través de Estados Unidos (¿y en Rusia y en China?) y de la UE y de la OTAN… Posiblemente no estaría con ninguno ni nada de eso pues los que me conocen bien saben que soy muy crítico con ambas organizaciones, incluso con los Estados Unidos, pero para mí es mucho peor el programa que nos ofrece China a largo plazo. Ya he dicho muchas veces que debería haber una »refundación» europea, un continente asentado en las ideas tradicionales que nos hicieron grandes en el pasado, esa que parece haber olvidado la UE.

He tenido mis momentos de cabreo con Rusia por su ataque a Ucrania y he podido decir cosas en su momento que posiblemente hoy no diría, sí, lo reconozco, pero eso no quita para seguir en el fondo respetando a Rusia y su historia, aunque bien es cierto que haciendo »borrones» en mi memoria como por ejemplo del período soviético. Eso no quita tampoco que en cierta medida continúe »cabreado» con el señor Putin por su ataque a Ucrania y, para mí, sí, dando la espalda a Europa.

Ante la decadencia clara y evidente de unos Estados Unidos asfixiados, Rusia podría haber jugado en un futuro inmediato un papel como  »abanderado» europeo. Estando previamente dentro de la UE (¿sin entrar en el Euro?) y tal vez de la OTAN o colaborando con ello cuando tocase. No creo que hubiese sido un títere como ahora lo es de China, y menos en estos tiempos. Podría habernos guiado y ayudado de alguna manera a los europeos a »refundar» , a largo plazo, esa nueva Europa asentada en las ideas tradicionales. Aunque si lo piensas bien… ¿Con Putin y su camarilla al frente de Rusia hubiese sido eso posible? Tengo mis dudas. Lo que está claro es que China va por ahora ganando la partida; ha puesto de su lado a Rusia (sin mucho esfuerzo), con todo lo que eso supone a nivel geoestratégico y en recursos, y por supuesto está haciendo lo que le da la gana ya en el mundo, en Ucrania, en África, en Asia… ¿Dónde está el límite chino?  Yo creo que es el mundo en general. Vayámonos preparándonos entonces…

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Resumiendo. Rusia debería ser una pieza clave para el entendimiento entre Oriente y Occidente apoyando de forma clara a este último, pues Rusia siempre ha querido ser más europea que asiática.

Autor

Ivan Guerrero Vasallo
Ivan Guerrero Vasallo
Iván Guerrero Vasallo (Santander,1984) es propietario de la Librería Virtual Iván G. y editor del blog Codex Historicum. Además de estudioso y lector voraz de libros relacionados con la Historia de la Humanidad, es un gran aficionado a la escritura. Escritor y novelista.
https://www.amazon.es/Iv%C3%A1n-Guerrero-Vasallo/e/B00LDBGY1O
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Geppetto

La alternativa a este mundo unipolar en el que USA nos mete por narices sus problemas mientras crea el mundo Woke no es China-Rusia , es conseguir una situacion en el que el poder, la fuerza este lo suficientemente repartida para que nadie pueda organizar el mundo a su antojo.
Un balanceo de fuerzas que impida que nadie se considere el gendarme del mundo y riegue con sus miasmas al resto del mundo como esta haciendo EEUU.
Europa necesita zafarse de la tutela Norteamericana y debe volver a ser un continente con vida y cultura propias alejada de ese sarpullido infeccioso llamado USA que esta metiendo en Occidente una increible cantidad de basura en nombre de SU democracia.

Hasta aquí

China es un país que tiene muy sometida y amedrentada a su población y es verdad que su forma de gobernar es peor incluso que la occidental. Pero es que occidente está en total decadencia y los líderes occidentales totalmente sometidos a la agenda globalista, que es inaceptable para los intereses de la humanidad.
Lo que planteas en el artículo es como si te preguntan que prefieres, una patada en los guevos o un puñetazo en el ojo.

Hakenkreuz

Esto solo lo soluciona Dios y nadie más.

China es un infierno sobre la tierra.
Poblacionalmente tiene un desequilibrio contra natural de su población: 116 varones por cada 100 mujeres, como consecuencia de la diabólica política del hijo único y del infanticidio femenino al nacer. Ese desequilibrio poblacional, en un estado policial de familias con hijo único, va a multiplicar los problemas psicológicos de la siguiente generación si llega a vivir, pues los líderes comunistas han preparado el camino hacia su propia autodestrucción. En China sigue siendo frecuente la compra venta de niños y niñas en un mercado creciente como si fueran meras figuras de porcelana, la prostitución infantil, el abandono de niños y niñas en ciudades y todo tipo de atentados contra la infancia.
China tiene problemas enormes para alimentar a toda su población, oficialmente más de 1500 millones. En China no es extraño comer insectos, gorriones, ratones, ratas, palomas, culebras, lagartos, perros, gatos y todo tipo de animales. El canibalismo no ha desaparecido en China por mucho que trate de ocultarse. Las cosechas de arroz no bastan para alimentar mínimamente a su población.
En China no hay libertad de ningún tipo. Hay aborto millonario, eutanasia, gulags con torturas inhumanas, ejecuciones por decenas de miles, holodomor y sustracción de órganos vitales a los reclusos, todos ellos simples disidentes que piden libertad. En China se experimenta con presos vivos sin ninguna restricción. Lo que la propaganda roja acusaba con mentiras a Menguele de hacer en campos de concentración, en realidad lo hace hoy día China en sus gulags con los disidentes que allí quedan recluidos. Y la población hospitalaria tampoco se libra de los más crueles experimentos para el Estado. Los vagabundos lo son por no aceptar el sistema comunista. Su esperanza de vida se reduce drásticamente.
En China no hay libertad de movimiento entre ciudades y pueblos, no se puede circular en automóvil por el país (aparte que buena parte de China no tiene carreteras, solo caminos polvorientos y embarrados), como en cualquier país occidental. No se puede fotografiar libremente China y salir con las fotos al exterior. No hay libertad de expresión ni de cátedra. No hay confidencialidad de datos y de comunicaciones. Por supuesto que la disidencia fue aplastada por las orugas de los tanques en la plaza sangrienta de Tianamen en 1989, donde se masacraron a pacíficos estudiantes que pedían tránsito a la democracia como en el Este de Europa, todo ello con el cómplice silencio de occidente. Ni en Berlín en 1953, ni en Budapest tres años después, ni en Praga en 1968, hubo una mayor crueldad contra la población manifestante.
La vivienda en China es estatal, por mucho que se empeñen muchos en decir que China es «capitalista» (otro monumental engaño de su propaganda diabólica), es decir, la asigna el Estado según decisión de sus burócratas comunistas, generalmente a afiliados o trabajadores útiles. Los metros cuadrados de los que disfruta cada persona en las ciudades de China es inferior a los 13 metros cuadrados que, como máximo, disfrutaron los ciudadanos soviéticos en su mejor momento. Se da el caso de millones de familias viviendo en una sola habitación. El hacinamiento en China es inhumano y fuente de mortalidad descomunal en sus frecuentes epidemias. En China solo vive materialmente desahogada la nomenklatura del PCCh y aquellos a quienes éstos privilegien.
En China no hay limitación de la jornada laboral, pues es un régimen esclavista del Estado. No hay sindicatos, ni huelgas, ni protestas, pues impera el terror rojo a ser deportado a un gulag, ejecutado o degradado en el trabajo, con pérdida de vivienda y de ciertos bienes esenciales.
Las obras públicas en China tienen una siniestralidad descomunal, especialmente la minería. La salud laboral no tiene protección alguna en China. Cada trabajador es perfectamente prescindible en una nación enemiga de la vida. El régimen comunista es simple y llanamente, esclavista.
El ejército es un cobardísimo instrumento de terror al servicio del partido comunista chino contra su propia población. Aunque aparenta mucho poder, no es más que mera fachada que no sostendría una guerra de verdad ni dos meses, por muy numeroso que sea.
Las infraestructuras solo son aparentemente modernas en las grandes ciudades, las únicas que el régimen infernal chino permite mostrar al exterior, así como los testimonios de sus asalariados de occidente que hacen propaganda para China. Las autoridades comunistas han tratado de imponer el comunismo incluso a las congregaciones católicas que allí tratan de evangelizar. De hecho, es muy dudoso que allí exista realmente Iglesia Católica, salvo en clandestinidad, pues la oficial es una farsa teatral sin Dios solo válida para incautos.
El entorno rural continua siendo estatal. Todas las tierras, granjas, recursos ganaderos, forestales, mineros, etc., pertenecen al Estado, que se apropia de las cosechas y mantiene a la población rural asalariada, pero encarcelada en sus aldeas y pueblos, sin posibilidad de emigrar libremente dentro de China, y menos al exterior. Respecto a la emigración al exterior, China ha enviado muchos chinos afines al partido comunista fuera de su país con finalidad de espionaje, imitando así la actividad de la que el bloque soviético extraía su limitado progreso tecnológico. China es la nación más irrespetuosa con la propiedad industrial, tecnológica e intelectual, habiendo desarrollado canales de espionaje muy refinados (teléfonos móviles con sus aplicaciones espías).
Los productos manufacturados chinos son de pésima calidad, copia de los occidentales y fabricados sin ningún límite referente a normas sobre toxicidad de materiales o de peligrosidad sobre la salud, luego aparte de la mala calidad del producto chino, hay que añadir al mismo su peligrosidad en su uso o consumo. Y los productos agropecuarios son extremadamente peligrosos para la salud, sin controles sanitarios algunos, sin control de calidad, sin información acerca de procedimientos de elaboración, ingredientes, etc. De China han partido las peores epidemias y pestes de la historia, la última, la del covid.

China ha sido calificada con sumo engaño de «capitalista» porque adoptó exactamente el mismo sistema económico comunista aperturista que tuvo la antigua República Democrática Alemana (RDA) durante los años setenta y ochenta, previos a la reunificación alemana tras la caída del comunismo allí, en la que muchas multinacionales y grandes empresas europeas y norteamericanas se ubicaron en su territorio produciendo allí con mano de obra disidente anticomunista, sin límite de jornada laboral, ni de regulaciones contaminantes, ni huelgas, con gran disciplina laboral y con tan solo una fracción del coste laboral que tenían en occidente, para luego no vender allí el producto, cosa que hubiese sido imposible de llevar a cabo y les hubiese reportado nulo beneficio porque el Estado comunista se hubiese quedado el beneficio, sino en occidente tras trasladar desde allí el producto en camiones, barcos o aviones. Ese sistema de la RDA, que para las autoridades comunistas de allí tenía por objeto aprender el modo de producir bienes de consumo por copia, se implantó también en China, con lo cual, no solo no se logró acelerar la caída del comunismo, como muchos «optimistas» creían al llevar allí la industria, sino que se ha apuntalado el comunismo al enseñarle a sobrevivir y mantenerse, ahora con más medios y conocimientos para los que no ha gastado sus recursos en absoluto. El comunismo en China ha sido alimentado por la industria occidental y fortalecido por ella, multiplicando la sangre y la opresión sobre centenares de millones de seres humanos, en lugar de liberarles. Y China es ahora dueña de mucho más poder, tierras, fábricas, infraestructuras y recursos, todos de titularidad estatal, que no privada (en China no hay propiedad privada, que se olvide el engañado con esa falacia. En China no hay propiedad privada desde 1949) de lo que fue jamás antes, no obstante, todavía muy lejos de ser una nación fuerte. Por eso ahora imitan la producción de occidente, pues la I+D+I en un país comunista es nula, por el terror y el desincentivo. Eso sí, esa imitación es de pésima calidad, como todo el mundo comprueba del producto procedente de allí, que en lo único que es competitivo es en su bajísimo precio.

China se ha apropiado de las inversiones extranjeras directas de las industrias de occidente durante décadas. Ha acabado con la industria textil, calzado, muebles, juguetes, metálicas básicas, porcelana y todo tipo de industrias intensivas en mano de obra en occidente. Ahora ya aspira a desbancar la industria del automóvil occidental. Sus avances en la industria militar y aeroespacial no pasan de ser mera propaganda ficticia, pero no dejan de sorprender en su capacidad de espionaje a USA y otros países. Allí ha ido a parar la soberanía industrial de Europa y de Norteamérica por el puro el puro afán de obtener la rentabilidad más alta posible confiando que así se acabaría con el comunismo. Y ahora China chantajea a todo occidente amenazándole con expoliarle toda la industria que tiene allí (perteneciente a decenas de millones de accionistas occidentales directos o indirectos, por medio de fondos de inversión) si no se aceptan sus condiciones económicas fuera de China, unas condiciones que, de aplicarse, destruirán a toda la humanidad (agenda 2030, entre otras. El peor lobo disfrazado del más inocente corderito). Si se trata con el demonio, el demonio acabará por dominar. Los políticos de toda la tierra, en el gobierno o la oposición, ya son funcionarios de China. Esto no tiene solución política. Y, lamentablemente, tampoco militar.

Rafael F.

Que pesadez eso de arrastrarse ante el mundo anglosajón. Solo lo puedo entender desde el complejo. Complejo ante los muchachotes yankis (blancos, negros o del color que sea) con sus uniformes de gala o de combate, complejo ante sus mujeres, ante sus empresarios explotadores que no pagan seguros sociales etc, ante un sistema que no te obliga a llevar casco o cinturón de seguridad, que no tiene seguridad social… Suena a persona scomplejada cuyo objetivo es viajar, a, Disneyland o Nueva York, que le, cae, la, baba, ante un McDonald’s… En definitiva de, ser colonizado, explotado, engañado, deseoso de ser cipayo y ser logista, especialista en paellas para marines o aviadores Usa. ¡¡Léanse el artículo que le visto a Blas Piñar el puesto, caramba!! (¡¡hasta el Generalísimo llegó a babear delante de los yankis, pero mantuvo la cabeza fría en Cuba y Vietnam y a Carrero ke costó la vida!! ‘¡Y dejen de ver «Salvar al soldado Ryan» que fueron los rusos los que de verdad arrasaron la Wehrmacht!)

aliena

Y se te olvida el babeo ante su idioma, que se ha materializado en la destrucción completa del idioma español en los últimos 15-20 años; adopción de la sintaxis inglesas, vocablos ingleses ( arrumbando a los españoles correspondientes ) y esa jerga que consiste en palabras que suenan a españolas pero son una adaptación fonética de las inglesas. Empezaron los hispanoamericanos ( «malditos gringos» pero hablemos como ellos ) y después España cometió la abyección de copiar a los copiones y así no hay forma humana de acceder a un idioma digno del nombre «español» a menos que acudas a libros – originales o traducciones – artículos, documentales, películas – originales, con subtítulos o dobladas – programas de radio, artículos de prensa…anteriores al año 2000 y soy generosa. Después a todos los perpetradores de la infamia se les llena la boca con «la lengua de Cervantes».

aliena

y los nombres anglosajones. De nuevo fueron los hispanoamericanos de los «malditos gringos» los que empezaron a dar a sus hijos los nombres de «Nelson», «Wilson», «Lincoln», «Fanny», «Jenny» o «Gladys», pero como los españoles de hoy en día competimos por humillarnos más que nadie, también ejercemos ahora de monos de imitación, pues ya hemos tenido que adoptar la abyecta práctica.

Enrique Pascual

No, la dicotomía que presenta usted un es totalmente errónea, uno no tiene porqué desligarse del Imperio Anglosajón para caer en manos de China, España es España y tiene además todo un mundo para ella si quiere Hispanoamérica, lo mejor que podía hacer España es abandonar la OTAN que ha demostrado ser una organización terrorista y entablar relaciones serias de amistad y colaboración con Rusia, por cierto la imagen de Rusia es y será cada vez mejor, la apoya todo el mundo menos el Imperio Anglosajón, Corea del Norte, la Unión Antieuropea y Japón, basta ya del ridículo seguidismo a aquellos que siempre y siguen continuando debilitarnos y si pueden destruirnos.

Rafael F.

Coooorreeeectoooo. Se me ha, olvidado el idioma. Se nos cae la, bava, ante el inglés de una manera lamentable. Y en cuanto a lis desgraciados hispanoamericanos, no he visto nada más servil ante Usa q esas Yennis y esos Wilsons. ¡¡¡Yo en el aeropuerto prohibía a la, entrada, a todo aquel con semejantes nombres. Iros a Nueva York!!!

José Luis Fernández

Geográficamente España forma parte de Europa y el pueblo español forma parte de la gran familia de pueblos que comparten una misma civilización, la Civilización Occidental, que tiene sus raíces en la Grecia clásica, en el Imperio Romano y en el Cristianismo. Nuestra pertenencia al mundo occidental (que incluye no solo a Europa sino a todo el continente americano, desde Canadá hasta Argentina) esta fuera de toda duda y nuestro destino futuro es seguir formando parte de esa civilización que, con sus luces y sus sombras, ha sido y debe seguir siendo la cumbre de todas las civilizaciones humanas que han existido en este planeta; la crisis actual que aqueja a la Civilización Occidental será superada a medida que vayan ganando influencia los partidos políticos que defienden los valores morales tradicionales y que vayan perdiendo apoyo social las nocivas ideologías «progresistas».
Por otra parte, creo que Rusia debe volver a formar parte del continente europeo, aunque la mayor parte de su territorio esté situado en Asia, tal lo como estuvo desde los tiempos del Zar Pedro el Grande hasta la revolución bolchevique. El pueblo ruso es mayoritariamente cristiano (de la Iglesia Cristiana Ortodoxa) y se sienten más afines a los pueblos europeos que a los pueblos asiáticos. Vladimir Putin, que fue un admirador de mundo occidental hasta el año 2.000, se sintió resentido con Occidente (especialmente con EEUU) al ver el desprecio con el que era tratado su país y por el cerco de bases militares que fue estableciendo la OTAN (a las órdenes de EEUU, por supuesto), pero el pueblo ruso no es un enemigo de los pueblos occidentales. En cuanto a China creo que ese país nunca ha tenido la ambición de ser una potencia mundial, similar a EEUU, sino que busca impulsar su desarrollo económico mediante la exportación de sus productos (muchos de ellos fabricados con patentes de empresas norteamericanas o europeas) para aumentar el nivel de vida de su numerosa población (unos 1.400 millones de habitantes; aunque China es actualmente la segunda potencia económica del mundo, detrás de EEEUU, la renta per cápita de los habitantes de China es de 12.550 dólares mientras que la de los habitantes de EEUU es de 70.240 dólares.

Geppetto

«Poblacionalmente tiene un desequilibrio contra natural de su población: 116 varones por cada 100 mujeres,»

«China tiene problemas enormes para alimentar a toda su población, oficialmente más de 1500 millones»

Eso significa guerra a corto plazo

Geppetto

«Geográficamente España forma parte de Europa y el pueblo español forma parte de la gran familia de pueblos que comparten una misma civilización, la Civilización Occidental, que tiene sus raíces en la Grecia clásica, en el Imperio Romano y en el Cristianismo»
Eso se acabo cuando Napoleon metio a tiros los conceptos revolucionarios de la Francia(como se decia en la epoca).
Que son los que predominan en la actualidad y nos han llevado esta descomposicion moral,base de la destruccion de las naciones

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