22/11/2024 00:51
Getting your Trinity Audio player ready...

El reciente y exhaustivo informe del doctor Young. 16 de este mes, escasos quince días, muestra un análisis detallado tanto de la sangre de los chutados como de las timovacunas. El informe es muy técnico pero merece la pena. Apretada síntesis: se ha encontrado óxido de grafeno en las cuatro vacunas. La microscopía electrónica de barrido y transmisión revela la explícita presencia del letal óxido de grafeno en las kakunas. Además en la vacuna de Pfizer se han encontrado parásitos de Trypanosoma cruzi, que están compuestos de carbono, oxígeno, cromo, azufre, aluminio, cloruro y nitrógeno. Por supuesto, el definitivo informe del doctor de la Universidad de Almería, Pablo Campra. Y, DEP, el probablemente asesinado doctor alemán Andreas Noack. Dos relevantes precedentes.

Timovacuna covidiota, tecno-veneno mortal, sin más

Los componentes de las nanopartículas de todas las vacunas ofrecen una lectura muy sugerente, interesante e inquietante, al igual que los componentes que crean efectos magnéticos en el cuerpo. Una pregunta sobrevuela en el aire. ¿Cuál es el efecto adicional de todo esto si añadimos la radiación ambiental a la mezcla del tóxico brebaje llamado vacuna?

Síntesis: el óxido de grafeno es una sustancia extremadamente conductora, muy sensible a la radiación electromagnética. El trabajo de Young también incluye el análisis de la sangre de los timovacunados. Una sangre que da verdadero asquete. Una pena. Confirmándose todo. Para mal. Como lo hacía el anterior informe . Kakuna, mortal veneno.

Tomados en conjunto, los componentes de la «vacuna», que incluyen óxido de grafeno reducido, entre muchos otros, y que pueden ser influidos por fuentes de radiación externas a nuestro cuerpo, crean una suerte de imprevisible sopa química y de radiación tóxica dentro de nuestros cuerpos.

LEER MÁS:  ¿Planificada y a punto de ejecutarse la Tercera Guerra Mundial ? Por Luys Coleto

Al menos, que no te inyecten más mierda en tu cuerpo

Grosso modo. Las «vacunas» NO son vacunas “clásicas”, ya de por sí ponzoñosas bazofias, sino nanotecnología de control dentro de nuestros cuerpos disfrazada de falsa “terapia” genética. Manipulación genética, preciso. En fin.

INFORME DEL DOCTOR ROBERT YOUNG SOBRE TIMOVACUNAS COVID

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.