España: “El régimen monárquico-comunista”. Por Miguel Sánchez

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España, está en una encrucijada, sin duda, la mayor de toda su historia.

El complot masón, liberal, comunista y ateo, está en marcha. Va con paso firme, sin respetar nada. Sigue teniendo la misma meta y es la de descristianizar a nuestra Patria.

Si os fijáis en todas las cadenas televisivas, no hay ni una sola que ponga un Portal de Belén, tan solo 3 figuritas básicas, que representan a la Natividad del Señor. ¿Fácil, no? Sin embargo, todos los platós, están llenos de árboles, con guirnaldas, bolitas y papás noeles. Hay algunos platós, que ya no caben más árboles, pues son fieles representantes de la masonería, el anglicanismo y el anticristianismo.

Muchos, casi todos se les llena la boca agua, cuando hablan de la Navidad; “Feliz Navidad”, “Que tengas unas Felices Navidades”, .., pero nadie quiere recordar, que esa emblemática palabra, viene de Natividad y representa el nacimiento del niño Jesús, que en ningún caso representa un árbol, ni un abeto, ni unas guirnaldas, …., que quedan muy bonitas, pero sin sustancia cristiana.

Los partidarios de la monarquía actual, el Liberalismo, la masonería, diciendo; “Hay que respetar La Constitución”, “La Constitución de todos”, …., será la Prostitución de tu puñetera madre. Esos componentes del ganado lanar.

Los partidarios del Comunismo y la Masonería, son el mismo ganado que busca al Frente Popular, como meta.

Los primeros y los segundos, aunque ellos mismos, ni se lo crean, son el mismo rebaño, con los mismos pastores, persiguiendo llevarnos al matadero.

Este pueblo español, este pueblo con mente de serrín, atrofiada, adoctrinada, sumisa, incauta y atea, aún no se ha caído del burro. Quizás cuando lo haga, no caerá al suelo, sino a un desfiladero profundo, del que jamás podrá salir.

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Cuando los dos Traidores; Juan Carlos y su botones, para todo, Adolfo Suarez, soltaron a todos los etarras criminales, ya que al morir “el dictador”, ya no matarían, nadie puso el grito en el cielo, todo se hizo, sin protesta de nadie. Esa era la “Hoja de Ruta”, para terminar con la Nación española, como Patria unida y católica.

Cuando el “marchante”, huido, abrazó tiernamente a su querido amigo Santiago Carrillo, nadie acusó a ese Perjuro y Crápula de Traidor, es más le aplaudieron, su gran gesto buenista, sin darle mayor importancia y olvidando, que fue el mayor genocida del siglo XX, nacido en España.

Ese maldito malhechor, sentó la bases, de éste País, convertido en nacionalidades, separatismos y herejes por doquier.

El pueblo, este pueblo miserable, acomplejado, miope, que no ve más allá de un palmo, no solo ha sido engañado mil veces, sino que aún viendo los engaños, no hace nada para remediarlos.

Se diría que vive permanentemente dentro de una burbuja, sin aire y sin alimento, solo con los oídos puestos y recibiendo consignas que acepta como propias.

Este lanudo pueblo, el día que despierte, se tire de la cama, no sabrá si está en España o está en un País de Países, sin religión, sin valores, sin historia. Entonces, será demasiado tarde, para librar batallas, pues será un mero muñeco, de pin, pan, pun, que ha sido vejado, humillado, desposeído, adulterado y esclavizado con el sello de identidad del comunismo, la masonería y la globalización impuesta: “EL BOZAL”

Autor

Miguel Sánchez

Empresario. Licenciado en Marketing y en Dirección de Ventas. Escritor de varios libros, sin publicar, aún. Aficionado a la escritura y a la historia de España.

Caballero Legionario que fue del IV Tercio Sahariano Alejandro Farnesio, en dónde estuvo en Mando Bandera. Escogido para portar al Santo Cristo de la Buena Muerte, representando a la Xª Bandera.

Congregante del Santísimo Cristo de la Fe, Cristo de los Alabarderos y María Inmaculada Reina de los Ángeles, en la Catedral de las Fuerzas Armadas

Luchador nato por el Valle de los Caídos y sus monjes Benedictinos, por nuestro Cristo Redentor, la Familia, contra el Aborto y la Patria Grande, Unida y Gloriosa, desde la muerte del General Invicto.

Amigo, seguidor y admirador de la figura más transcendental y entrañable del siglo XX español, D. Blas Piñar, mi Caudillo, siempre junto a él, tuve el honor de aplaudirle, ovacionarle, dialogar y abrazarle, porque era mi ídolo y lo seguirá siendo por toda la eternidad. Y tengo el orgullo, que de sus magníficos libros escritos, poseo unos diez, dedicados, con cariño y con su pluma de oro, como escritor en la excelencia.

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