Agosto me recuerda siempre a García Lorca: homenaje sin discursos, al poeta, solo un poema. Por Eduardo López Pascual

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No quiero que este mes de agosto, como todos los meses de agosto, me olvide de Federico Garcia Lorca, el genial poeta asesinado en Granada un día 18, triste fecha para las gentes de buena fe. No puedo borrar de mi memoria la indignación y tristeza con que aparece su muerte, a pesar de los esfuerzos de la Falange Pepe y Luis Rosales-, por salvar su cárcel y su vida a manos de un batiburrillo reaccionario y de envidias tribales.

Pero hoy no toca descender a manejar datos históricos más o menos objetivos, de cómo murió sino a compartir con muchos españoles de a pie, amantes de la justicia y la poesía, a uno de los mejores creadores de imágenes y metáforas literarias más sublimes en lengua española. Sin duda un poeta para la historia. Es también, este tiempo, ocasión para que de una y otra parte de la sociedad. se hagan verdaderos ejercicios de recuerdo al escritor andaluz; momento para que leamos infinidad de textos, relatos, comentarios, artículos, incluso libros en honor y memoria del singular autor del Romancero Gitano, de Poeta en Nueva York y, claro es, de los formidables dramas de Yerma o La Casa de Bernarda Alba..

Yo en cambio, que no puedo ni quiero aparentar ser experto lorquiano, me limito a reconocerlo como referente insustituible en la poesía, y ya, de paso, a atreverme a dedicarle una pequeñita obra poética. que titulo, quizá pomposamente, “Nuevo romancero a Federico”. Eso sí, animado por las profesionales palabras de una dama de la poesía española: Dionisia García (Feliz coincidencia de apellido con el poeta), con la que modestamente, intento mostrar mi absoluta identificación con Federico. Ese Romancero, empieza así:

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El bosque guarda La luna/que asoma por la cañada/

sus ramas miran la noche/buscando versos de plata.

por encima el cielo cubre/miles de estrellas blancas

y tu cara, Federico/me huele a tierra mojada”..

Y es que Federico ha sido y es, de siempre, una referencia para la conducta falangista. Hay que señalar que fue `precisamente un autor jose antoniamo, descrito por el historiador José M. García de Tuñón Aza en un primoroso trabajo que publicó la revista “Altar mayor” y reproducido en el digital de la Fundación José Antonio, quien ya en marzo del 37, antes de un año de su ignominiosa muerte, Luis Hurtado, escribía un hermoso articulo anunciando al poeta de Fuente Vaqueros como el mejor poeta del imperio español. y poco después otros camaradas en Antequera, en abril del mismo año 1937, aparecía en la revista Antorcha que dirigía el catedrático Nemesio Sabugo. y hasta en el periódico de los sindicatos azules “CONS” tal como indica la profesora María Silva López.

Y más aun ya que el acreditado novelista Carlos Rojas, registra el artículo en el diario Unidad, de San Sebastián, dando lugar todas estas apariciones en un proceso contra los autores que, al final no se sustanció en sentencia alguna, por no ser hallado el autor del escrito. De modo que aun exponiéndose a situaciones muy comprometidas, los falangistas desde la primera hora mostraron su afecto y admiración por la obra del genial poeta y dramaturgo Federico García Lorca.- Cualquier otra versión de su comportamiento y del favor de sus afiliados, entra de lleno en la miserable deformación de la verdad y de la historia

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