¿De dónde sacarán estos mentirosos los 200 mil millones? Estafan a los españoles y no bajan los impuestos como habría que hacer. Por José Miguel Pérez

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¿Quién pagará los 200 mil millones de euros de ayuda a los sectores económicos, laborales y vulnerables de España anunciados por Pedro Sánchez como panacea ante la gigantesca crisis que el PSOE ha provocado? Porque la situación de la contabilidad nacional está clara: no tenemos esa cantidad. Seamos serios: el gobierno ha vuelto a echarnos una gran mentira; la de que el Estado posee solvencia, y garantías, para inyectar 200 mil millones en la vida económica, empresarial y social. Y esto es falso.

El Producto Interior Bruto de España, es decir el valor neto de los bienes y servicios que produce nuestra economía en un año, viene a ser, aproximadamente, de 1 billón de euros. ¿Se va a gastar el gobierno el 20 por cien de esa cantidad -200 mil millones- en un plan de ayuda económica? Es imposible.

¿Dirá entonces el gobierno que pondrá sobre la mesa avales públicos, y que lo financien, por tanto, los bancos? Posiblemente. ¿Qué sucederá entonces? Pues como pasó en la crisis de 2008: nos metemos en una espiral recesiva, el gobierno va a tener que endeudarse más, mucho más (y ya estamos en un 100 por cien del PIB de deuda pública). Esos avales anunciados no podrán ser ejecutados por un Estado deficitario, que emitirá deuda a mansalva, con la prima de riesgo estratosférica y los bonos de deuda soberana devaluados. ¿Qué hará el gobierno? Pedir auxilio a Bruselas. ¿Qué hizo Bruselas en 2012 cuando España estuvo a punto de ser intervenida? Rescatarnos enviando poco menos de 45 mil millones de euros para salvar bancos quebrados. Con aquel rescate incurrimos en una hipoteca contra nuestra soberanía económica que todavía hoy no hemos devuelto y seguimos pagando. Este es el escenario previsible de lo que va a suceder. Resumen: más deuda, más esclavitud impositiva y más mentiras.

En medio de la paralización económica general que vive España ahora, ¿era imprescindible liberar a las empresas de pagar las cotizaciones sociales por los ERTEs y dar garantía a los trabajadores lacerados por la extinción temporal de su empleo de cobrar prestación por desempleo y que la Seguridad Social costee sus cotizaciones? Sí. Ha sido lo correcto. Desgraciadamente, ¿en qué redunda esto? En más desembolso de recursos públicos, en un mayor agujero de la Seguridad Social –ya devastador- e irremediablemente en el aumento de la deuda pública.

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Otro inminente daño añadido al desfonde económico y social es que muchas empresas afectadas por EREs o ERTEs cerrarán y lanzarán al paro definitivo a sus empleados, agigantando más nuestro déficit y también las cifras de parados.

En el terrible escenario actual, ¿qué hace este inepto gobierno socialcomunista con los autónomos creadores de riqueza y las Pymes que son el principal tejido productivo del país? Nada. Dará una ayuda a aquellos autónomos que suspendan su actividad o a los que la clausuren por las pérdidas sufridas: éstos serán los únicos que serán exonerados de la obligación de pago de cuota. El resto de autónomos que trabajen para sobrevivir tendrán que pagarla. Los “aplazamientos de pagos tributarios” anunciados por Sánchez son también un brindis al sol, un pan para hoy y hambre agravada para mañana. Porque en unos meses tendrán que pagar los tributos que les fueron “congelados” más los del periodo correspondiente. La pesada carga tributaria acumulada que tendrán que pagar llevará al hundimiento de muchas empresas en poco tiempo.

El gobierno nos toma por imbéciles, y no sólo no libera de impuestos a los creadores de riqueza, sino que promete “humo” engalanado, eso sí, con el confeti de tertulianos y economistas manipuladores bien asalariados para mentir sobre la gravedad de la situación.

El gobierno no ha hecho lo que tenía que hacer, que era anunciar bajadas masivas de impuestos. Al contrario, los subirá irremediablemente. No lo hará este mes. Pero sí después. Su plan consiste en aumentar la presión fiscal al diesel, la comida basura, los plásticos, las tecnológicas, tasa Google, tasa Tobin, IRPF de rentas de más de 130 mil euros, impuestos autonómicos como Sucesiones, etc. En definitiva, el hachazo fiscal de la izquierda se mantiene y se aumentará. Eso que falsariamente dicen, de que “sólo pagarán los ricos” además de inmoral es mentira: porque acabará siendo una subida impositiva para todos los españoles, dado que cuando la izquierda anuncia “progresividad fiscal” o redistribución de la riqueza extiende al conjunto social el atraco impositivo ya que no logra recaudar aquello que hipócritamente anunció que conseguiría “yendo contra los ricos”.

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Estimado lector: sería creíble que Papa Estado pudiera salvarnos si nuestro Estado se basara en la austeridad y no en el despilfarro; si España tuviera capacidad de maniobra en expansión del gasto público no subiendo impuestos – como se hará- sino habiendo ahorrado lo que durante 40 años se ha gastado nuestra clase política en Autonomías (100 mil millones anuales tirados), administraciones duplicadas o triplicadas, subvenciones a pesebres de feministas e inmigrantes, y cargos de origen político en número desproporcionado (de los 22 mil de 1975 pasamos a los 400 mil de 2020).

Pedro Sánchez no es veraz en su plan de ayuda económica ni en su futura gobernanza. Es un mentiroso compulsivo que nos lleva a velocidad de crucero a una crisis de consecuencias impredecibles. Sólo nos ha anunciado pomposas mentiras fácilmente rebatibles y desenmascarables.