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Matasanos sin escrúpulos, sometidos a FARMAFIA 

Y lo anunció el director de la Caisse Nationale de l´Assurance Maladie. Y lo vuelve a confirmar, entre otras fuentes, la citada Caja Nacional del Seguro de Enfermedad. Sobornar con unos eurillos a los matasanos que chuten el matarratas. Ese matarratas que, de momento, está ocasionando enfermedades autoinmunes, parálisis y muertes por todo el mundo. Y ya verán  cuando podamos ver los efectos a medio y largo plazo, los verdaderamente atroces. Pues lo dicho tantas veces, hondos deterioros neurológicos, esterilidad y «castración» masculina. Y larguísimo etecé, cánceres incluidos, por supuesto.

Se agregan los 5,4 pavetes antedichos a los previos 9´60 pagados por cada chute de la vacuna, algo que convierte a los deplorables galenos en vulgares comisionistas y patéticos conseguidores del superferolítico negocio de las vacunas, tan solo una minúscula parte del colosal negocio de FARMAFIA (pero el más rentable biopolíticamente). Vamos, lo de toda la vida. Nada nuevo bajo el sol. Libro del Eclesiastés, remembranza. 

La mayoría de los médicos no se vacuna

Aunque la medicina dejó de ser la juiciosa búsqueda de la razonable salud de las personas y, desde hace decenios, irreversiblemente transformada en burdo apéndice de FARMAFIA, no lo olviden, pudiendo decir no, dijeron sí. Se corrompieron obscenamente. 

Y si lo hacen serán cómplices de un  genocidio. Y lo saben, al menos lo intuyen. Ellos – y enfermeros plurales – apenas se vacunarán. Como el amor lopesco, quien lo prueba lo sabe. Y la mafia sanitaria conoce a la perfección la repugnante mierda vacunera. En fin.

https://www.ameli.fr/paris/medecin/actualites/lancement-de-la-vaccination-contre-la-covid-19-cotation-et-remuneration-des-medecins

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.
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