Se busca político decente que denuncie falsa pandemia. Por Luys Coleto

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Ladrad, perritos. Ladrad, chuchos, inmejorable signo de buen cabalgar. Ahora con vuestro terrorismo de los «rebrotes», seguís acojonando. Al menos, eso procuráis. Y amenazando con cercanos y probables nuevos secuestros domiciliarios. Tal vez, en esta segunda ocasión, la jugada no os salga tan redonda. Y, tal vez – ¿existen los milagros? – algún político honorable eche un cable(al cuello, no, obvio).

¿Se les cae el falsidémico teatro?

Se os cae a cachos el teatrillo. ¿Pero no comenzó todo en un insalubre y malsano mercadillo de Wuham donde los virus acróbatas desfilaron de sopas de murciélagos a humanos? Las sabrosos caldos de quirópteros o pangolines, ¿no dio el virus malo maloso el susodicho respingo zoonótico?

Vaya, ahora por lo visto, el virus, según riguroso y reciente estudio de la Universidad de Barcelona, ya zascandileaba desde entre nosotros, por lo menos desde marzo de 2019. En año y medio, deberían de haber muerto millones y millones y millones de personas en todo el orbe, según la trola oficial, ya que no hubo arresto domiciliario de la población alguna, prohibición de circulación, tratamiento con desinfectantes o puesta de bozales.

Si este estudio de la UB resultara cierto y llevamos conviviendo bastante tiempo con la fantasmal covid-19, desde marzo de 2019 más concretamente, entonces, ¿Sars -Cov – 2 = Gripe estacional con otro nombre mediante hábil truco de negros prestidigitadores valiéndose de nuestra generalizada y acrisolada idiocracia?

Político honrado, ¿dónde estás?

El poder, en cualquiera de sus formas, macro o microfísico, tan solo me ocasiona sudores fríos. Y la representación delegada de ese poder, incluso más. Pero bien, acepto político como persona que pudiera escucharte al menos. Cualquiera, en principio, de los 350 gallifantes de la Carrera de San Jerónimo podría valerme.

Más allá de lanzarse los ancianos muertos a la mollera – el eterno, soporífero y castrador » y tú, más»- ¿alguno se toma la molestia en indagar y responderme alguna pregunta en ciertos asuntos?

¿De qué estaríamos hablando? ¿El virus existe, aunque no haya sido ni aislado ni purificado ni secuenciado (ya que no hubo aislamiento previo)? ¿Es cierto que el ARN del espectral Sars-Cov-2 es muy similar a los ARN, casi idénticos, de otros coronavirus que todavía continúan sin aislarse? Si no se aislaron, ¿cómo carajo van a compararse entre sí?

¿Pero existe siquiera el virus Sars- Cov-2?

¿Es cierto que la sintomatología del presunto Sars-Cov-2 es idéntica a otras infecciones víricas, incluso bacterianas? ¿Es innegable que el test, llamado rápido, de reacción de antígenos/anticuerpos es una mierda pinchada en un palo y la PCR (utilizando material genético) roza lo fraudulento, llegando a dar positivo en cabras y papayas?

Toda la farsa vivida (¿soñada?) gira alrededor de la cifra de «contagiados» y muertos. Dichas dígitos adolecen – debido a sus pésimos y falsarios métodos de detección- de la menor credibilidad. Con ese dato crucial, ¿a qué se enfrentan, entonces, los galenos?

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Incluso la Organización Mafiosa de la Salud manifiesta sus reparos ante los dos tipos de test utilizados. Por no hablar de Kary Mullis, creador de la PCR, que hasta su muerte no paró de insistir que su invento no servía para detectar carga vírica ¿Entonces? ¿Asumimos la arbitrariedad metodológica y la chapuza científica a la hora de decidir si alguien es «positivo» o «negativo»?

Político, ¿me ayudas? En serio, ¿de verdad me representas? Pues sigue preguntando junto a mí. ¿La gente siguió muriendo por otras causas? Imagino que sí. ¿Hubo una deliberada eutanasia de Estado (en España y parte del mundo) por acción (sedación con cloruro mórfico) u omisión (denegación de traslados a hospitales), en la que participaron, consciente o inconscientemente, el gobierno nacional, las diversas autonomías (no solo Madrid) y los variados estamentos médicos?

¿Hospitales o ambicionados mataderos?

Más ¿Fueron los tratamientos utilizados más frecuentemente- hidroxicloroquina y remdesivir- los más adecuados? Obviamente, no. Más bien, lo contrario. Brutales efectos adversos. Echa un ojo al asunto. ¿Y los sacrosantos respiradores? ¿No aceleraron muchos óbitos? ¿Hablamos de hospitales o de buscados mataderos? Político cualquiera, elucubra sobre la iatrogenia, la medicina contemporánea como mal, no como bien.

Evanescente político, ¿preguntarás sobre el vínculo causal (o al menos, correlativo) entre los vacunados de la gripe 2019-20 y muchas defunciones? ¿Y otras causas? Se trata de investigar. Y preguntar a quién corresponda. ¿Toxicidad ambiental circundante aniquilando nuestros sistemas inmunitarios, sobre todo entre la población anciana (infinitamente más estropeada que generaciones precedentes, dada su hiperdrogadicción, medicados dicen)? Yonquis por lo legal, coño.

Más preguntas incómodas

Si ni siquiera están demostrados anteriores virus (y por ende, anteriores falsidemias), ¿por qué no miras las cosas de otra manera? ¿ por qué admites tan pastueñamente otra supuesta infección por otro presunto coronavirus? ¿Y si ciertas enfermedades son provocadas por venenosos tóxicos y, en ningún caso, por virus alguno? Un virus parece ser el hijo tonto al que se le echa la culpa de todo.

Letales tóxicos, vivaqueando felices, entre nuestras ambientales contaminaciones. ¿Por qué no preguntas por las perniciosas radiaciones electromagnéticas de las centrales eléctricas, incluida la oscura 5G, los transformadores, las líneas de alta tensión, las antenas repetidoras (otra vez la 5G), los teléfonos móviles, los radares o los equipos electrónicos de nuestras casas? Pregunta por las ondas Lilly de las cajas tontas, no estaría nada mal.

¿Estaba todo planificado? ¿Hacia dónde vamos?

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¿Y las putrefactas calderas de carbón, los disolventes usados en la construcción, los productos químicos en alimentación y limpieza, por ejemplo? Toc, toc, geoingeniería, estelas químicas. Pregunta si son algo más que vestigios de condensación, gaseosas huellas, vaporcillo de agua.

Y riza el rizo. Fracking. El «petróleo fracturado», ¿qué pasa con sus abundantes y continuas emisiones de cianuro? Otrosí: ¿Te interrogarás por la mafia que mueve los hilos de (casi) todos los medios de desinformación que propagaron (y siguen haciéndolo) el paranoico y arrollador pánico entre la población? ¿Y los censores, llamados hogaño verificadores, añadiendo sarcástico postureo al ultraje liberticida?

¿Hacia dónde vamos? ¿Se preparó (muy) minuciosamente esta falsidemia y lo pusieron negro sobre blanco (por poner un ejemplo: el escenario Bloqueo de paso del Informe Escenarios de futuro, 2010, de la Fundación Rockefeller)? ¿Preparan, en años venideros, otra falsa amenaza global en forma falsidémica, climática o alienígena? ¿Se va puliendo, a la sazón, la Matrix con sus «controladores», negros y satánicos hechiceros, manufacturando una inventada hiperrealidad – en la que la mayoría de mis semejantes parecen habitar- absolutamente ajena a la propia y desnuda realidad?

¿Nos encaminamos, sin prisa pero sin pausa, hacia un despótico orden mundial tecnocrático, sin libertad alguna, previa devastación económica en varias fases? Tened un poco de coraje y hablad de Gates. Y de Soros. Y, sobre todo, quid, de aquellos oscuros que se hallan muy por encima de éstos. Y nunca aparecen (ni aparecerán) en los medios de intoxicación.

Ascenso

Gatead la pirámide, poliédrica y en forma de red. Entonces, tal vez, reconoceré a un político justo. En fin.

Autor

Luys Coleto: Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.