20/09/2024 12:59
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Antier, no más, analizando el “lapsus” linguae de Friedrich Merz en el Parlamento teutón el pasado 27 de febrero. Les expuse plurales y misceláneas y versátiles hipótesis, salvo tormenta solar, sobre lo que puede acontecer hoy. El «catalizador»/ “reconfigurador” evento que mutará irreversiblemente nuestro mundo. El punto de no retorno. Equinocciales y otoñales delirios genocidas. Sin ir más lejos, la declaración formal de la Tercera Guerra Mundial. O tal vez, nasti de plasti: entre testigos de Jehová y calendarios mayas, yo también sobreviví al apocalipsis en veinticuatro ocasiones (y tú también). Eso sí, falsaria satrapía covidicia, un ensayo en seco, precisamente, para este escenario bélico.

Escalando

Recapitulemos, postreras calendas, acelerándose los tiempos. Tras los referenda de estos días, aproximadamente el 15% del territorio ucraniano pasará, vía hechos consumados, tal Crimea, a formar parte de Rusia (de hecho, se puede afirmar que la Segunda Guerra Mundial se proseguía en la «disputada» región del Dombás).

Otrosí: por primera vez, desde el 24 de febrero pasado, Putin ha utilizado el término “guerra” en su discurso, con todo lo que ello implica. “Los occidentales empujaron a Ucrania a la guerra con nosotros”, dejando suficientemente claro que dejó claro que no se trata de un «raro» conflicto bélico (“operación militar especial”) contra Ucrania, sino que es una contienda en la que intervienen otros países occidentales. Verbigracia la OTAN (Ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, confirmación “Ya estamos luchando no solo contra Ucrania, sino contra la OTAN y Occidente”).

Guerra, escalada y  blablabla. “Todos los medios” posibles para defender el territorio ruso, clara alusión al uso de “armas nucleares”. De estado larvario a eclosión. Y, hoy, de forma explícita, declaración formal. De la guerra. Y recordemos que el reciente funeral de la coronada lagarterana, la cumbre de los «gamberros» Shanghái en Samarcanda  y el  neoyorquino y onusino conciliábulo, perfilando el asunto. Tambores de guerra.

Programándola en tu mente

Por tú viajero recuerdas el intercambiado y luciferino epistolario entre Mazzini y Pike. Porque bien sabes que las dos anteriores guerras mundiales fueron, como esta Tercera que se aproxima, absolutamente prefabricadas (El Suicidio de Europa, 1968, de Michel Sturdza: el turbador personaje de Canaris, clave: Hitler y Putin, partícipes de las genocidas farsas).

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Y en abril de 2018, la televisión estatal rusa preparaba a sus compatriotas para la III guerra mundial. Y en mayo de ese mismo año, los ciudadanos suecos recibieron en sus hogares explícitas instrucciones precisas en caso de guerra mundial,  donde se daban indicaciones para que los ciudadanos puedan seguir abasteciéndose de agua, calefacción y no permanecer incomunicados. Y Medvédev dixit, mano derecha de Putin: «Los jinetes del Apocalipsis avanzan al galope». Y Lavrov, ministro de la guerra. El «riesgo es significativo y no debe subestimarse». Y el ex primer ministro ucraniano Mikola Yánovich Azárov​ aseverando que la OTAN planeaba desencadenar la III Guerra Mundial, tiempo ha, con el uso de “armas nucleares” contra Rusia. Kiev desempeñado, según Azárov, un papel crucial en desencadenarla.

Y altos oficiales de la soldadesca británica, Patrick Sanders y Nick Carter, pues más de lo mismo. Y Soros anunciándola en marzo, latoso e infumable artículo mediante: » La Tercera Guerra Mundial que tiene el potencial de destruir nuestra civilización». Y Kissinger en agosto, hace escaso mes, no más, ídem de linezo. Y el erudito musulmán, Sheij Imran Hussain, en el clavo en todo desde hace casi una década. Y lo de toda la puta vida desde que el mundo es mundo: mientras el sonido de los tambores de guerra se hace más fuerte…el verdadero enemigo permanece oculto tras las bambalinas en este gran y aniquilador teatro (nada calderoniano) del mundo.

¿Entonces en Denver?

¿Se está preparando ALGO en la capital de Colorado para este 24 de septiembre? ¿Están repartiendo “bolsas de evacuación” gratuitas, preparando a conciencia desde hace tiempo a los habitantes de este estado de Gringolandia para algún tipo de inaudito desastre, cisne negro mediante? ¿Qué se espera hoy 24 de septiembre en Denver? ¿Su aeropuerto recién inaugurado, mural de cuatro piezas, representando la guerra biológica, la muerte y la destrucción, el abandono de toda soberanía nacional y la aparición de una nueva religión mundial?

Y, desde luego,  el interior del aeródromo internacional (¿búnker ultrasecreto o colosal esvástica?): inolvidable lápida, con imágenes crípticas de los “iluminados” y la Gran Masonería, con su correspondiente “cápsula” del tiempo, enterrada debajo, que se abrirá en ¡¡¡2094!!!

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¿Pero existen las armas nucleares?

Imposibilidad tecnológica, pues. Grosso modo, LA FISIÓN NUCLEAR NO ES EXPLOSIVA. «Arma» apocalíptica que nunca “existió”: existen pero no funcionan, pues. Ni Usa ni el resto de naciones  poseen “armas nucleares” de destrucción masiva. Patraña. Sin ir más lejos, como la calandraca pangolínica. O como el timo del calentón güebal. O, sobre el asunto de marras, como el plutonio.

Cualquier chorrada en sentido contrario deviene embuste, propaganda y manipulación useña (y más allá) desde el final de la Segunda Mundial: principiar una guerra fría para controlar el planeta completamente a través de la coerción y el pánico y la paranoia de masas. Hiroshima, Nagasaki, Chernóbil: nada es como te contaron. Y, desde luego, los rusos, como en todo, en el siniestro y ciberpoligonero (FEM) tinglado.

¿Entonces?

Suceda o no suceda nada hoy, Plan Morgenthau a nivel planetario. Con su suculento colapso financiero global, «certeza matemática», Edward Dowd dixit ex gerente del fondo buitre BlackRock. Diezmado y «reseteado» planeta, esclavos totalmente digitalizados/transhumanizados. Sin dinero efectivo, Súper-Leviatán masónico y tecnocrático  Tiranía global…

…Y, por supuesto, DESOBEDECER. SIEMPRE Y EN TODO LUGAR. En fin.

 

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.