05/04/2025 05:49
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Hunos quieren cargarse la Monarquía,

Hotros no quieren ni oír hablar de República

y en el Centro hace mucho frío

¿Qué hacemos?

Hunos quieren una España Plurinacional

Hotros quieren que sólo haya una España

y en el Centro hace mucho frío

¿Qué hacemos? 

Hunos quieren cargarse el Estado de Derecho

Hotros defienden la separación de Poderes

y en el Centro hace mucho frío.

¿Qué hacemos?

Hunos son enemigos de la Propiedad Privada

Hotros piensan que la Propiedad Privada es sagrada

y en el Centro hace mucho frío

¿Qué hacemos?

 

Hunos quieren imponer sus ideas marxistas comunistas

A hotros les da miedo el comunismo y quieren libertad

y en el Centro hace mucho frio

¿Qué hacemos? 

Hunos quieren Autonomías y «chiringuitos» para los suyos

Hotros piensan que la Administración del dinero público es fundamental

y en el Centro hace mucho frío

¿Qué hacemos?

 

 

Y así podíamos seguir hasta el juicio final, pues está claro y demostrado que desde la Ley de Memoria Histórica han «resucitado» las dos Españas… y los demonios de antaño.

Por tanto, aquí «eso» del diálogo, del consenso, de la moderación y hasta de la Democracia ya es pasado. Hemos llegado, estamos otra vez en lo de siempre, O TÚ O YO, O NOSOTROS O VOSOTROS… O NUESTRA REPÚBLICA O VUESTRA MONARQUÍA O NUESTRA ESPAÑA O VUESTRA ESPAÑA.

O nuestra Educación, nuestra Sanidad, nuestra Agricultura, nuestra Policía, nuestra Guardia Civil, nuestras Fuerzas Armadas, o tu calle o mi calle…

Pues, vale. Vuelta  a empezar y otra vez al Cuartel de la Montaña, a Belchite, al Alcázar de Toledo, a Teruel, al Ebro o a Paracuellos… y maricón el último.

LEER MÁS:  La desaparición de la Constitución en el Código Ético de los parlamentarios nacionales. Por Diego Fierro Rodríguez

¡Triste destino el de esta España  que no sabe vivir en paz, en la paz de todos… si no es a tiros!

 

 

Autor

Julio Merino
Julio Merino
Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.

Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.

Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.

En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.

En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.

Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.

Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.