14/05/2024 10:13

El problema de profundo fondo es que padecemos un gobierno ilegal-no sólo ilegítimo por mentir-que ha traspasado todas las líneas rojas con total impunidad, desde el fraude electoral de base que cuela una y otra vez sin consecuencias-como la última manipulación del sistema de votaciones en el Senado para negociar in extremis la aprobación de los decretazos-hasta la corrupción del Estado de Derecho con una compra de voluntades reiterada y malgasto de recursos públicos continuado. Acciones delictivas de base y consentidas con una manga larga donde nos cabe la propia supervivencia como país. Y así todo admitido de quien estaría detenido en cualquier país verdaderamente consciente de lo que significa la democracia y la defensa de los derechos en libertad.

 

 

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Alvar

A los tiranos, en Roma, los aviaba la misma guardia pretoriana. En España no disponemos de este eficaz recurso. Craso error.

Hakenkreuz

Y lo peor no es la imposición de mascarillas en hospitales, centros de salud, medios de transporte público y establecimientos públicos, que desde luego es altamente dañino para los pulmones si se utiliza durante horas seguidas (ningún cirujano sobrepasa cierto límite de tiempo con la mascarilla puesta). Lo peor está por venir, que obliguen a inocularse la solución final so pena de despido de cualquier trabajo, impedimento de entrada en supermercados y de no poder comprar y vender sin pasaporte (solución tipo marca de la bestia del Apocalipsis de San Juan Apóstol) de «vacunación» (inoculación contra la salvación eterna por confiar en el mentiroso como Eva en su caída) en mano (móvil) o frente (engaño diabólico). Ya no se dará tregua al mundo hasta que Dios salve a los suyos tras esta durísima prueba de tribulación.

No se detuvo la pandemia de covid como sí debió hacerse sin daño a personas y economía, como se hizo previamente con el ébola procedente de África (aunque quisiesen ahorcar a la presidenta de Madrid por ejecutar a Excalibur), que fue como debía haberse actuado con la peste roja china del covid reciente ya a comienzos de 2020 como muy tarde, cuando el científico portavoz de otros (cobardes que ahora se esconden so pretexto de que no había un «comité de expertos», para no reconocer que se equivocaron mortalmente para más de 100.000 españoles muertos apelotonados en funerarias y sin tan siquiera una despedida digna en cementerios, como Dios manda) ese de los rulos, el tal Simón, afirmó ante toda España, en concordancia con su criminal ministro filósofo de sanidad y su gobierno genocida socialista comunista antiespañol, que solo morirían «una o dos personas como mucho» (31/12/2020), sin ni una sola repercusión judicial. Ese gobierno impune ante su genocidio perpetrado por omisión del deber de protección de la población porque a la oposición conservadora le conviene que así sea, ellos sabrán porqué, pero no podrán ocultárselo a Dios mismo el Día del Juicio que se aproxima. Una vez propagada la peste roja del covid por parte de todos los culpables genocidas políticos y mercaderes del mundo (la infernal China la primerísima culpable de extender sus errores por el mundo, tiranizada por el comunismo macro genocida y satánico sin tasa del PCCh ante el que todo el mundo se arrodilla por un puñado de dólares ganados en bolsa, la macro asesina ONU, con su sección de abortos y eutanasias OMS, la infernal pro soviética progresista UE, el degenerado y pervertido Foro Davos, la demoníaca loba con piel de cordero progresista Agenda 2030 y sus asesinos promotores, organismos internacionales de funcionarios y de corrupción ilimitada, podridos y al servicio del demonio gobiernos nacionales, regionales, locales, políticos de todo signo y sus depravados votantes, que no paran de idolatrar al demonio y sus siervos con sus votos del modo más insensato, etc.), ya no hay freno a la muerte salvo por el Salvador (Jesucristo), venga del covid, cada vez más agresivo cuanta más química se añade en las inoculaciones y fármacos (que empeoran cada vez más la solución, en lugar de mejorarla, como con mentira afirman en los medios de prostitución de masas. De toda la vida se ha recomendado no mezclar medicamentos con alcohol, ¿y de mezclar inoculaciones, fármacos y viruses?), venga de las inoculación-solución final (para reducir población) que tan millonarios ha hecho a los accionistas de Pfizer con la sangre de sus incontables víctimas y demás centros de farmaco envenenamiento mundial abortistas y eutanasiadores, venga de la asfixia de la mascarilla cosida al rostro de su víctima sumisa con daños pulmonares irreversibles, venga de drogas de farmacéuticas o de las otras de toda la vida «ecológica» (alcohol, tabaco, marihuana, cocaína, heroína y demás sustancias de los esclavos desesperados dominados por ellas, cada vez mayor proporción de población de cada nación), de la ansiedad, depresión, enfermedad mental, ictus, enfermedades coronarias disparadas, turbo cánceres que proliferan para desesperación de los pocos médicos honrados que van quedadando en este proceso de selección adversa de abortistas y inoculadores de la eutanasia que son los que van prevaleciendo, etc. El infierno ha sido desatado, las puertas del infierno ya están aquí, y ahora no hay forma humana de detenerlo. La Santa Iglesia Católica Apostólica es el álamo de la resistencia con su oración y adoración eucarística, de ella depende la Salvación de las almas más que nunca. Queda pendiente de sentencia judicial del Cielo hacer pagar a los culpables, asesinos de vidas y, lo que es peor, de almas, y sus esclavos adláteres y vendidos como prostitutas por un plato de lentejas (mercantiles, empresariales o políticos y mediáticos).

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