17/05/2024 04:51

La cuarta sesión del juicio contra los hijos del empresario José María Ruiz-Mateos, fallecido en 2015, por los pagarés de Nueva Rumasa se celebró este jueves en la sede de la Audiencia Nacional de San Fernando de Henares, Madrid. Durante esta sesión, declaró Zoilo Pazos Jiménez, uno de los sobrinos del empresario, quien está acusado de estafa, blanqueo de capitales y alzamiento de bienes al igual que sus primos. También brindó su testimonio Joaquín Yvancos, quien fue el abogado y uno de los hombres de confianza de Ruiz-Mateos hasta la quiebra del grupo.

Zoilo Pazos, señalado como colaborador directo en la estructura de Nueva Rumasa, negó haber tenido responsabilidad en la gestión económica de las compañías del grupo. Afirmó dedicarse a las actividades comerciales en Murcia y que su presencia en Madrid era para tratar con el máximo responsable del holding. Al igual que sus primos, Pazos insistió en centralizar la toma de decisiones en José María Ruiz-Mateos padre, justificando su firma en documentos por la confianza y admiración que le tenía a su tío.

Pazos negó haber retirado fondos de las cuentas de algunas sociedades, a pesar de que según la Fiscalía era el único autorizado para hacerlo. Alegó que solo dispuso fondos para cobrar cheques dados por su tío debido a la enfermedad terminal de su padre. Explicó que firmaba los documentos que le indicaba su tío sin cuestionarlos por lealtad absoluta hacia él.

En cuanto a Joaquín Yvancos, abogado de los Ruiz-Mateos durante décadas, declaró que los pagos recibidos por servicios de asesoría jurídica fueron decisiones tomadas por José María Ruiz-Mateos como gratificación por su asesoramiento en compras realizadas por el grupo durante el periodo en que recurrieron a los pagarés para financiarse.

LEER MÁS:  San José artesano: Una fiesta de origen olvidado y venida a menos. Por Pedro Sáez Martínez de Ubago

Yvancos también estaba citado como testigo en esta causa, pero las partes que habían solicitado su testimonio renunciaron a ello antes del inicio del juicio oral. Actualmente se encuentra cumpliendo una condena de prisión en una cárcel de Valencia.

Dadas las declaraciones de los investigados que cargan toda la responsabilidad sobre el empresario José María Ruiz-Mateos, sólo falta su presencia para que la defensa salga redonda. Lo cierto es que el empresario jerezano cedió su herencia empresarial en el año 2004 recibiendo información desvirtuada que le impidió tener un conocimiento real de la marcha de las empresas y tomar decisiones acertadas, cuando él pensaba haber dejado a buen recaudo la dirección del Grupo Nueva Rumasa. Nubarrones de confusión en los investigados, frente a la conciencia tranquila del empresario ausente.

Suscríbete
Avisáme de
guest
1 comentario
Anterior
Reciente Más votado
Feedback entre líneas
Leer todos los comentarios
Pedro

Lo único que está claro es que se han «perdido» (pero no para todos), cientos o miles de millones de euros, y que ahora andarán escondidos por paraísos fiscales, y a disposición de los hermanos RUIZ-MATEOS…

1
0
Deja tu comentariox