El odio al Madrid simboliza el odio a España (o lo que revela la "descomunal" hipocresía del contrato de Messi). Por Luys Coleto

Getting your Trinity Audio player ready...

Indelebles rebuznos del en su día barcelonés Arzobispo Sistach. Y de la locoide y grotesca montonera Lucía Caram, deshonrando con sus hábitos la orden dominica. Fariseos de manual, pues. Jesús en el vigesimotercer capítulo de Mateo los deja perfectamente en su sitio. Guías ciegos, sepulcros blanqueados, raza de víboras. Incluso creo que Cristo se quedó extremadamente corto a la hora de diagnosticar tan turbias psicologías humanas.

Dobles y triples y cuádruples raseros

Las feroces críticas a Cristiano en 2009 y sus 98 millones y las infligidas a Gareth Bale y sus 91, un lustro después, son dos claros y paradigmáticos ejemplos de la repugnante e hipocritona doble vara de medir de la dictadura antimadrista que padecemos en España. Por tierra, mar y aire. En la red, en la caja tonta, en la radio o en la prensa, de «izquierdas» o » derechas». Como durante la plandemia, mutantis mutandis, da bastante más asquete escuchar Tiempo de Juego (Cope) que Carrusel Deportivo (Ser).

Por Neymar ni se sabe lo que se llegó a gastar el Farsa (superando ampliamente los 200 millones). Pero ciertos datos sí se conocen: 81 por el hogaño indio Luis Suárez, 145 por Dembelé, 160 kilos por Coutinho. El PSG, con 222 millones, recordemos, quebró el mercado con Neymar y el silencio eclesial siempre devino absoluto.

¿Qué esconde la doble vara de medir?

Lluís Maria Martínez i Sistach- rebautizado genialmente por FJL como Nostach – habló en su día de “dispendios descomunales». Reclamó “solidaridad y austeridad” ante la crisis que flagelaba al país en 2009. Toc, toc. Y ahora qué, ¿grazna algo el cardenal emérito o la frailuna montonera? Nada, obvio. ¿O sobre los futbolistas culés anteriormente citados cuyos fichajes superaron sobradamente los de Cristiano y Bale?

Y hoy, como en 2009, salvajísimo desguace económico de España. Y El Mundo, en su excelente edición de ayer, filtra el contrato del Faraón. El argentino ha cobrado más de 555 – 555. 237.619, exactamente- millones de euros en los últimos años vistiendo la camiseta blaugrana, deviniendo como consecuencia, por otra parte, caracolera ruina del Farsa. Nada más y nada menos que 264 euracos al minuto. Escándalo moral y vergüenza – propia y ajena – dicha cifra chirría a parte de la peña dada la calamitosa y funeral situación actual de nuestra patria común (y de parte del mundo).

LEER MÁS: La afición del Real Madrid da ejemplo y no acude a Cibeles para celebrar la Liga

Añejas busconas

Y, desde luego, ningún sacerdote o religioso catalán – ni del resto de España- ha saltado – ni saltará – para denunciar el «dispendio descomunal» del contrato de este diosecillo de cartón piedra, el futbolista más sobrevalorado que jamás vieron los tiempos. ¿Compararle al difundo Maradona? No insultes mi inteligencia, tan Corleone.

Y ojo, el Barça puede gastarse su dinero en lo que estime más conveniente y oportuno. Faltaría más. El meollo del asunto está en que cuando legítimamente lo hace el Madrid le llueven los palos – y puede que con sólidas razones – pero cuando lo hace el Farsa o cualquier otro club, todos callan como vetustas rameras. En fin.

Autor

Luys Coleto: Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.